El arbitraje boliviano tocó fondo. En medio de denuncias de pagos realizados el 2021 para evitar que un equipo salga campeón y diversas recusaciones y acusaciones de clubes nacionales que se sienten perjudicados, la Federación Boliviana de Fútbol (FBF) decidió que sea una terna chilena la que dirija la final de la Copa Apertura entre FC Universitario y San Antonio de Bulo Bulo.

Para el primer encuentro, que tendrá lugar en Cochabamba el miércoles 1 de mayo (15.00), Juan Lara (35 años) y José Cabero (39) fueron designados por la Comisión de Árbitros de la FBF, uno como central y el otro como VAR, además de los asistentes de campo Juan Serrano y Alejandro Molina, todos de la Asociación Nacional de Fútbol Profesional (ANFP) de la Federación de Fútbol de Chile.

Según el portal Premium, es la primera vez que árbitros extranjeros dirigirán partidos de un campeonato boliviano.

José Jordán, presidente de la Comisión Nacional de Árbitros de Bolivia, fungirá como asesor, brindando su experiencia y conocimiento en este encuentro crucial.

Esta medida se enmarca en la alianza entre la Federación Boliviana de Fútbol (FBF) y la Asociación Nacional de Fútbol Profesional de Chile (ANFP), la cual incluyó la capacitación de 49 árbitros bolivianos a principios de año, quienes tendrán su oportunidad en la Copa Simón Bolívar.

La decisión se da en medio de una serie de polémicas y denuncias contra el arbitraje boliviano, sobre todo de Bolívar, club que pidió investigar el partido en el que quedó eliminado con San Antonio de Bulo Bulo por dos presuntos penales que no se le cobraron aún con revisión del VAR.

Además, Bolívar y otros tres clubes cruceños – Oriente, Blooming y Royal Pari- exigieron a la FBF una serie de demandas para, en su criterio, mejorar el arbitraje boliviano, como que todos los referís centrales sean sorteados poco antes del encuentro y un comité “imparcial” alejado de la Federación.

Los cuatro clubes amenazan con no disputar el Clausura si no se cumplen sus pedidos.

Entretanto, según el medio digital Visión 360 fue Fernando Costa quien hizo una “gestión personal” para la llegada de jueces chilenos “con el objetivo de dar la mayor transparencia posible a los encuentros finales”.