El presidente de la Cámara Nacional de Comercio (CNC), Jorge Ascarrunz, advirtió este viernes que los empresarios solo aceptarán un incremento salarial igual a la inflación del 2023 e insistió en un diálogo tripartito entre su sector, el Gobierno y la Central Obrera Boliviana (COB).

“El año pasado ha habido una inflación del 2,11% y ese será el máximo número que deberíamos manejar en una reunión. Otro tipo de incrementos no van a tener respaldo”, dijo Ascarrunz, según reporte de La Razón.

Ascarrunz reclamó nuevamente una reunión “tripartita”, entre el Gobierno, los trabajadores y los empresarios privados para definir el incremento salarial.

“Deberíamos sentarnos en una mesa los trabajadores, los empresarios y el Gobierno. Lamentablemente, desde hace algunos años, nos han acostumbrado a que las reuniones sean bipartitas, entre el Gobierno y los trabajadores y que los empresarios no estemos tomados en cuenta. Eso no es correcto”, lamentó.

Semanas atrás, los Industriales pidieron congelar el incremento salarial este año y la Confederación de Empresarios Privados de Bolivia (CEPB) rechazó abiertamente los porcentajes pedidos por la COB.

La COB, en su pliego petitorio, pidió un incremento salarial 8% al salario mínimo y 7% al haber básico y, tras reuniones con el Ministerio de Economía, decidió mantener su pedido.

Ascarrunz, al respecto, aseveró que los empresarios no se cierran al incremento salarial, pero consideran que un porcentaje alto provocará que sus afiliados reduzcan sus planillas o se tendrá “otro tipo de problemas que pueden generar una inflación”.

“Siempre hemos privilegiado, antes que hacer incrementos salariales, mantener el empleo, porque somos los que generamos trabajo, arriesgando nuestro capital”, remarcó el empresario.