“Hay 1.500 personas desplazadas en toda la ciudad ¡Estamos respondiendo!”, aseguró el alcalde de La Paz, Iván Arias, este viernes por la noche. Y ante el pronóstico del Servicio Nacional de Meteorología e Hidrología (Senamhi) del retorno de lluvias continuas y hasta tormentas eléctricas en los siguientes días, aseguró que “están preparados”.

El Gobierno Autónomo Municipal de La Paz aseguró  que efectuó trabajos de prevención en 2023, pero este año se reportaron más emergencias debido al fenómeno de El Niño, ya que se rompieron récords por las precipitaciones pluviales continúas.

La comuna está en alerta naranja desde enero y no fue rebasada, pese al incremento de las lluvias.

“Ya son 240 maquinarias pesadas”, dijo el burgomaestre paceño; en los últimos días, algunas topadoras y excavadoras estaban paradas por la falta de diésel. Tras las reiteradas solicitudes de la Alcaldía, la Agencia Nacional de Hidrocarburos (ANH) aprobó la ampliación del cupo de acceso al combustible.

Respecto a los casos críticos, el secretario municipal de Resiliencia y Gestión de Vulnerabilidades, Juan Pablo Palma, detalló que en la cuenca del río Irpavi trabajan junto al Viceministerio de Defensa Civil. Hay maquinaria pesada que encauza el afluente y en coordinación con los vecinos se construyen gaviones.

“Los equipos están desde la confluencia del río Arunyata hasta la calle 18 de Irpavi y también para retirar material en el río Achumani; hay cuatro viviendas afectadas, estamos trabajando en el número sea mayor”, afirmó el servidor público.

En relación a Caliri, sostuvo que al ser una zona de material de relleno, “siempre tendrán deformaciones” y que los vecinos desmontaron un tinglado por prevención.

Y en el río Orkojahuira, Palma explicó que el ancho hidráulico es menor al de Irpavi y hay problemas en cinco puntos, pero que son atendidos. Mencionó que encontraron descargas de alcantarillado clandestinos; además, desobstruyen una de las bóvedas del río Choqueyapu y también trabajan en Manzanani y Seguencani.