El juicio contra Trump por los documentos confidenciales iniciará el 2024, en plenas primarias republicanas
La jueza Aileen Cannon, designada en 2020 por el ahora exmandatario, ordenó que el juicio comience en plena campaña presidencial. El líder republicano será el primer expresidente en la historia estadounidense en enfrentar cargos penales.
Una jueza federal de EEUU fijó la fecha del juicio contra el expresidente Donald Trump (2017-2021), en el caso de los documentos clasificados, para el 20 de mayo de 2024, justo al final de las primarias para la elección del candidato presidencial del Partido Republicano a la Casa Blanca y meses antes de las elecciones presidenciales de noviembre de 2024.
"El caso está fijado para un juicio con jurado en la división de Fort Pierce durante el período de dos semanas de juicio que comienza el 20 de mayo de 2024", afirmó la jueza de distrito de EEUU, Aileen Cannon.
Los fiscales en el caso acusaron a Trump de 31 cargos de retención deliberada de información de defensa nacional, uno de conspiración para obstruir la justicia, uno de retención de un documento o registro, uno de ocultar corruptamente un documento o registro, un cargo de ocultar un documento en una investigación federal, conspiración para ocultar y hacer declaraciones falsas.
Según la acusación, los documentos clasificados que Trump almacenó en cajas en su residencia de Mar-a-Lago en Florida (sureste)- después de dejar la presidencia- incluían información sobre las capacidades de defensa y armas tanto de EEUU como de otros países.
También se mencionaban programas nucleares de EEUU, potencial vulnerabilidad del país norteamericano y sus aliados a un atentado militar y planes para posibles represalias en respuesta a un ataque extranjero.
Trump es uno de los candidatos republicanos para las elecciones presidenciales del 5 de noviembre de 2024.
Incluso aunque fuera condenado a cárcel, Trump podría presentarse a las elecciones y ser presidente. En ese caso, tendría dos opciones: dirigir el país desde una celda o, lo que se da por hecho, perdonarse a sí mismo, con lo que no solo saldría en libertad, sino que el delito sería expurgado de sus antecedentes penales, como si no hubiera existido nunca. En todo caso, se da por hecho que el equipo legal del ex presidente continuará batallando por el aplazamiento del juicio.