El Tigre mostró otra cara e incomodó a River, pero perdió y está fuera de todo torneo internacional
En el 'Más Monumental', The Strongest perdió por 2 goles a 0 y no seguirá compitiendo internacionalmente este año.

Despedida digna. El Tigre mostró una nueva cara e incomodó a River en el ‘Más Monumental’; no obstante, terminó perdiendo (2-0) y quedó eliminado de todo torneo internacional.
Los de Achumani plantaron cara a ante un rival que puso en cancha lo mejor que tiene, pero que fue impreciso durante gran parte del partido y por eso terminó transpirando más de lo esperado.
El encuentro, eso sí, inició cómo se preveía. El Tigre con dos líneas de cuatro bien cerradas para aguantar los ataques del equipo argentino.
River es el mejor equipo actual de la liga argentina y demostró por qué. Con la pelota bajo su control es un equipo casi imparable, con presión constante, continuos cambios de banda y buen manejo de pelota. Por eso, cada que encontraba espacios complicaba a la defensa atigrada.
Aún así, los de Achumani lograron acomodarse en la cancha. Con sobresaltos, despejaba los ataques riverplatenses siempre buscando construir alguna contra que complique a Franco Armani.
Empero, el primer golpe lo recibió rápidamente. A los 13, River logró conectar una serie de pases en el área atigrada y, al final, Nico de la Cruz dejó el balón de frente al arco para que Aliendro con un remate suave pero bien colocado venza la resistencia de Guillermo Viscarra. Era el 1 a 0.
Parecía que lo peor estaba por venir. Los fantasmas de 3-6 que sufrió el Tigre en Potosí el fin de semana empezaban a aparecer, pero ahí surgió el carácter del equipo paceño.
De a poco, el Tigre empezó a tener mayor control del balón y, sobre todo, forzar tiros de esquina y tiros libres para aproximarse a arco rival.
Así, con actitud, empezaron a llegar las oportunidades atigradas. Un remate de Triverio, otro de Isnaldo y otro de Chura provocaron más de un susurro en el Más Monumental. Además, mediante pelota parada, Castillo tuvo una buena chance que no puso resolver.
Claro, River tampoco renunció al ataque y aprovechó el adelantamiento de la defensa atigrada para estar cerca de aumentar el marcador. La más clara fue cuando Beltrán y Fernández encararon solos a Viscarra, pero fallaron en el pase final y el Tigre seguía sobreviviendo.
Ya en la segunda parte se vio el defecto encontrado por el flamante técnico stronguista: la falta de condición física.
Las piernas no eran las mismas y el Tigre no pudo mantener la intensidad que pretendía. También hubo un notorio bajón en el rendimiento riverplatense y por eso el complemento casi careció de ocasiones de peligro.
Fue sobre el final que apareció otro gran defecto del fútbol boliviano: la distracción. Carlos Roca se dejó anticipar en una jugada que parecía haber pasado de riesgo y provocó que Miguel Borja anote el segundo a los 90.
No hubo tiempo para más. El Tigre mostró otra cara pero no le alcanzó y no solo quedó eliminado de la Libertadores, sino que tampoco pudo arañar un puesto en la Sudamericana.
Los de Achumani aún lamentan la dura derrota que sufrieron ante Sporting Cristal de Perú en La Paz (2-1), lo que les priva de seguir compitiendo internacionalmente este año.