La asambleísta departamental de Santa Cruz por el Movimiento al Socialismo (MAS), Muriel Cruz, fue dada de alta este jueves y, a su salida, pidió aprehender a todos sus agresores y negó que se haya tratado de un “show”.

“Esperamos que se puedan capturar a aquellas personas (que faltan) y que se pueda llegar a (la verdad) de los hechos, quiénes las convocaron, por quiénes estuvieron ahí, de qué manera estuvieron ahí, porque está agresión para nada es un show, les aseguro que han sido días bastante difíciles”, afirmó.

Cruz afirmó que por la agresión sufrida seguirá necesitando fisioterapia y aseguró tener un “tic” en el cuello.

“Tengo este tic en el cuello, que ustedes pueden ver que no lo puedo controlar, y esto es un tema que también va a quedar”, señaló.

Asimismo, pidió al Ministerio Público y de Gobierno dar con todos los responsables de la violencia que se cometió en su contra.

“Le pido al Ministerio Público, al Ministerio de Gobierno y a todas las autoridades correspondientes, que se pueda dar con el paradero de estas personas para que se haga justicia”, indicó Cruz.

Y agregó: “No es justo que esto le suceda ni a mí persona como masista, ni a uno de color verde, ni a cualquier otro que sea de otro partido. Esto no puede pasar en nuestro pueblo cruceño”.

La violenta agresión contra Cruz se dio el viernes, cuando trataba de ingresar al Legislativo departamental, que tiene sus oficinas en la Gobernación, para la posesión de dos asambleístas indígenas que ponen en riesgo el control de Creemos sobre el ente deliberativo.

Hasta el momento, 13 personas fueron aprehendidas por la golpiza a la asambleísta Cruz y fueron enviadas a Palmasola (Santa Cruz) con detención preventiva por 180 días. Sin embargo, La Policía continúa con la búsqueda de otros involucrados en la agresión.