Estuvo cerca de sumar. The Strongest cayó por la mínima diferencia ante Fluminense en Brasil (1-0) en un partido que tuvo una polémica jugada en el final, que privó a los de Achumani de llevarse un empate.

Fue un buen partido del Tigre, que supo entender el escenario en el que jugaba y sobre todo el rival al que enfrentaba. Con dos líneas de 4 bien cerradas, una garantía en el arco con un Guillermo Viscarra que sigue en el mejor momento de su carrera, un jugador diferente como Michael Ortega y un batallador como Enrique Triverio, estuvo cerca no solo de mantener su arco en cero, si no que tuvo tres jugadas claras para empatar, incluido un gol anulado tras una jugada que aún deja dudas.

Y es que el Tigre tuvo claro su libreto. Los primeros 20 minutos se dedicó a defender el 0 en su arco, y, a partir de ahí, intentó generar algún peligro en arco rival siempre amparado en el taleto de su ‘10’, el colombiano Ortega.

El plan salió casi a la perfección el primer tiempo. Hasta los 40, el Tigre defendía bien y lograba cerrar los espacios al ‘Flu’; empero, el gol llegó a través de una de las grandes debilidades quew tiene el fútbol boliviano en general: el juego aéreo.

A los 40, el equipo brasileño tuvo un córner – dudoso- a favor. Jugó el balón corto para poder lanzar un centro venenoso que Nino cabeceó para vencer a Viscarra. Era el 1 a 0.

El marcador, obligó a que el Tigre salga el segundo tiempo a tratar de buscar el arco rival y tuvo 10 minutos de buen fútbol ofensivo.

Ortega, Isnaldo y Arrascaita tuvieron más protaginismo y al menos los visitantes empezaron a jugar en arco contrario. El empate pudo llegar con un gran remate de Álvaro Quiroga, que el arquero del ‘Flu’ sacó casi del ángulo.

Viéndose controlado, Fluminense volvió a adelantar sus líneas y logró tener el control del balón y el partido casi durante todo el segundo tiempo, pero no pudo encontrar los medios para superar a la defensa atigrada y, sobre todo, a un siempre seguro Viscarra.

Ya en los últimos 10 minutos del partido, el técnico atigrado hizo lo impensado. Sacó a dos hombres demarca y pudo a dos atacantes, era una señal de que para el Tigre era matar o morir.

Las chances escasearon para los atigrados, pero en la última jugada del partido llegó la gran polémica. Guillermo Viscarra lanzó un pelotazo largo, Triverio ganó la posición a su marca y anotó el empate; sin embargo, el árbitro anuló el gol por una presunta falta del delantero argentino.

La repetición dejó dudas, aunque mostró un ligero toque de Triverio. ¿Suficiente para cobrar falta?, quedó la duda. El VAR no intervino y acabó el partido.

Una derrota diga – si las hay- para los de Achumani, que ahora deberán pensar en el torneo local antes de ir a Perú a jugar con Sporting Cristal por la tercera fecha de la Libertadores, torneo en el que ya tiene tres puntos sumados producto de su victoria ante River Plate, en La Paz, en su debut.