Choquehuanca reivindica la Wiphala como símbolo de armonía y unidad
Durante la iza de la bandera, como parte del programa protocolar por el 24 de septiembre, Choquehuanca sufrió un agravio del gobernador de Santa Cruz Luis Fernando Camacho, quien no le dio la palabra, le evitó el saludo y hasta lo provocó en su discurso.
El presidente en ejercicio, David Choquehuanca, reivindicó el valor cultural de la Wiphala, el patujú y otros símbolos, usos y costumbres originarios, y recalcó que su esencia y composición representan mensajes de unidad, sabiduría y esperanza.
Hizo referencia al tema en respuesta a los actos de racismo y discriminación que en horas de la mañana empañaron la celebración oficial por los 211 años de gesta libertaria de Santa Cruz.
“La Wiphala es la codificación del arco iris, que es sagrado para los guaraníes, los quechuas, los mojeños, los chiquitanos”, sostuvo en el acto de inauguración de la séptima Cumbre Departamental de Reconstrucción Económica y Productiva que se efectuó este mediodía en el coliseo de la Universidad Autónoma “José Ballivián” de Trinidad.
“Cada uno de nosotros somos del tamaño que somos, ni más ni menos. No tiene que haber superiores ni inferiores, explotadores ni explotados, y eso nos dice la Wiphala, que es un código de equilibrio, hermandad y armonía”, manifestó.
Durante la iza de la bandera, como parte del programa protocolar por el 24 de septiembre, Choquehuanca sufrió un agravio del gobernador de Santa Cruz Luis Fernando Camacho, quien no le dio la palabra, le evitó el saludo y hasta lo provocó en su discurso.
Además, los seguidores del gobernador cruceño empujaron, insultaron y menoscabaron a indígenas del oriente que llevaron la Wiphala que, aunque fue izada al lado de la tricolor, luego fue retirada.
Fue así que Choquehuanca centró su alocución en estos hechos y llamó a la recapacitación en pos de la unidad.
“Hay que ser conscientes de que debemos buscar armonía, hermandad y consensos; no imponer. La Wiphala nos acompaña, igual que nuestra tricolor y nuestro patujú. Son símbolos de inclusión; necesitamos inclusión e integración”, dijo.
“El pueblo está mirando a las autoridades que quieren ir por el camino de la división, hay que recordarles que lo que se siembra se cosecha. A un hermano que tenía poncho, lo querían atropellar en la plaza de Santa Cruz; no pueden volver el abuso ni la humillación, todos merecemos respeto. El poncho, al igual que nuestras camisetas, merece respeto”, lamentó.