La exdiputada del Movimiento al Socialismo (MAS), Susana Rivero, a través de su cuenta de Twitter, refutó el informe de la Iglesia respecto a los reuniones convocadas para pacificar el país tras los conflictos postelectorales del 2019 y negó que haya sido consultada sobre la posibilidad de asumir la presidencia del Estado y mucho menos rechazó esa posibilidad.

“Jamás estuve en los planes aunque no renuncie (…) En reunión del 12 a la que me llamaron a incorporarme JAMAS se me consultó nada, menos se habló de mi (...)”, señaló Rivero.

La exdiputada, en ese sentido, reiteró que la oposición ejecutó su “plan B” sin apoyo del Movimiento al Socialismo y ello consistía en que Jeanine Añez – entonces segunda vicepresidente de la Cámara Alta- asuma la presidencia del Senado y luego del Estado.

Señaló, por ejemplo, que el 10 de noviembre la oposición ya consultó a Jeanine Añez si estaba dispuesta asumir la presidencia, cuando las reuniones para definir qué hacer ante el ‘vacío de poder’ dejado por la renuncia del expresidente Evo Moraless3e realizaron el 11 y 12 de ese mes.

“No sé si es Conferencia Episcopal o medios, que por 3ra vez intentan lo que a estas alturas y con pruebas ya es claro. Nunca vi a esos embajadores que mencionan, en reunión del 12 (estuve poco tiempo) y es la propia Jeanine quien confirma que le ofrecieron presidencia el 10 (…) Su apuesta al vacío de poder (pretexto o excusa) nunca existió. Estuve aquí, no renuncié, el 11 firmé documentos, fui el 12 a la reunión de la Católica, pero ellos el domingo 10 ya habían gestionado la presidencia para Jeaine como acabamos de conocer”, aseveró.

“Sus primeras versiones decían que yo había renunciado, como ese relato se les cayó ahora inventan que me preguntaron algo. Triste papel señores. Dios les perdone sus pecados! (sic)”, agregó.

La tarde este martes, la Iglesia Católica Boliviana, a través de la Conferencia Episcopal Boliviana (CEB), presentó su “Informe- memoria de los hechos del proceso de pacificación en Bolivia octubre 2019-enero 2020”.

El documento, entre otras cosas, da detalles del rol de la Iglesia en el proceso de “pacificación” del país durante los conflictos post electorales del 2019 y da detalles de cómo se definió que sea Jeanine Añez – entonces segunda vicepresidenta del Senado- la que asumiera la presidencia del Estado, tras la renuncia de Evo Morales.

En ese sentido, una de las revelaciones de la Iglesia da cuenta que la senadora Adriana Salvatierra y la diputada Susana Rivero, ambas del Movimiento al Socialismo (MAS), no quisieron asumir la presidencia del Estado, argumentando que “sus vidas corrían peligro”.