La expresidenta del Estado, Jeanine Añez, afirmó que parte de sus declaraciones ante la Fiscalía se basaron en el libro “la revolución de la pitias” y otros n su propia vivencia.

En ese sentido, la expresidenta pide investigar “ambos elementos” para que “se manifieste justicia”.

“Respecto a mi declaración informativa ante el Ministerio Público, realizada los días 7 y 8 de junio del presente, aclaro que al empezar mi declaración señalé que la narrativa sobre los antecedentes sucedidos ante de mi llegada a La Paz y sobre hechos que no estuve presente se basan en el libro ‘La Revolución de las Pititas’ publicado por Página Siete y otra parte de mi declaración desde mi llegada a La Paz el 11 de noviembre sobre mis ‘vivencias’ en tales hechos. En todo caso, ambos elementos he pedido y pido investigarlos para que se manifieste justicia”, señala el comunicado compartido por Añez en sus cuentas oficiales en las redes sociales.

Asimismo, Añez reitera su posición respecto a que la sucesión que la llevó a la presidencia del estado, en noviembre de 2019, fue avalada por el legislativo y también por el Tribunal Constitucional Plurinacional.

La semana pasada se dieron a conocer las declaraciones que Añez hizo ante la Fiscalía dentro de las investigaciones por el caso del presunto golpe de Estado del 2019. La expresidenta cumple detención preventiva por ese hecho.

En sus declaraciones, Añez relató las horas previas a su asunción como Presidenta. Entre otras cosas, habla de que Ricardo Paz, vocero de Carlos Mesa, le consultó sobre su predisposición para asumir la presidencia, de que en La Paz fue transportada en un helicóptero de las Fuerzas Armadas y hasta fue disfrazada por la policía para poder caminar por La Paz.

También habla de que antes de encabezar la sesión en la que se autoproclamó presidenta sostuvo reuniones con Luis Fernando Camacho.

Asimismo, Añez también reveló que fue Carlos Mesa – líder de Comunidad Ciudadana (CC)- quien se opuso a que fuera Adriana Salvatierra o cualquier legisladordel MAS quien asuma la presidencia del Estado, en noviembre del 2019.

Anticipándose a la renuncia de Evo Morales a la presidencia – en medio de denuncias de fraude y tras perder el apoyo de la policía y las Fuerzas Armadas- y de Álvaro García Linera a la vicepresidencia, Salvatierra señaló que le correspondería a ella asumir la presidencia del Estado. Empero, según Añez, la idea fue rechazada por Mesa, quien se opuso a que cualquier legislador del Movimiento al Socialismo (MAS) asuma el cargo advirtiendo que de tomar esa decisión no se pondría fin a las protestas de parte de la ciudadanía.

“En esa reunión Adriana Salvatierra plantea y anticipa ante una posible renuncia de Evo Morales, que ella accedería a la Presidencia en sucesión constitucional y llamaría a elecciones con un nuevo Tribunal Constitucional (sic). Y le consulta si eso sería aceptado por el señor Carlos Mesa. El señor (no identifica el nombre) Quiroga llama a Carlos Mesa por teléfono para consultarle y éste le responde que la ciudadanía no aceptaría esa sucesión (porque) las protestas continuarían”, reveló Añez en su declaración, según informaron Página Siete y La Razón.