Salvador Romero anunció hoy que en las próximas horas presentará su renuncia a la presencia del Tribunal Supremo Electoral (TSE) así como también a la vocalía del Órgano Electoral.

En conferencia de prensa, Romero dio lectura a una extensa carta en la que señala que mañana presentará su renuncia y asegura dejar el cargo con la satisfacción de haber cumplido varios de los objetivos que se trazó al asumir el cargo.

“Al presentar mañana mi renuncia a la Presidencia y a la vocalía cierro una etapa personal y concluyo una fase institucional con un tribunal presto para encarar nuevos desafíos, libre de ataduras, independiente de fuerzas políticas o fuerzas de grupo”, aseveró Romero.

La autoridad, asimismo, lamentó los ataques del que fue objeto durante los procesos electorales de las elecciones generales de octubre del 2020 y también de marzo del 2021 y aseguró que prefirió no contestarlos en procura de garantizar unas elecciones libres y democráticas.

“Me han pintado de todos los colores, atribuyéndome vínculos con organizaciones políticas, que cada una sabe no tengo con ellas, sino con la elección transparente como eje vital de la democracia. He escuchado acusaciones disparatadas, temerarias y antagónicas, como si no ser de un campo me convirtiera en miembro del otro campo. En vez de acumular rencor opte por no responder, olvidar el nombre de los detractores, las noticias falsas y el contenido de los anónimos que han circulado por las redes sociales, para concentrarme en el trabajo que importaba, entregar a Bolivia resultados legales y legítimos para la presidencia, asamblea, gobernaciones, alcaldías y concejos”, afirmó.

“Ningún ataque, insulto o provocación nos impidió mantener el equilibrio y la mesura. Fue la ruta para que el TSE sea de todos sin ser de nadie, fue el sacrificio por el bien superior de unas elecciones justas y valió la pena”, agregó.

Señaló, asimismo, que cometió errores y metas que no logró alcanzar, pero aseguró que “sobre mis hierros e insuficiencias conserve las convicciones democráticas, actué con imparcialidad, mire los derechos y ello más allá de las esfera electoral”.

De la misma manera, destacó que los procesos electorales desarrollados por el TSE bajo su presidencia transcurrieron en paz, los resultados fueron aceptados por los contrincantes y la sociedad civil y, sobre todo, los resultados reflejaron la voluntad del pueblo.

Empero, advirtió que la democracia no inicia ni termina con un proceso electoral y llamó a seguir defendiendo ese concepto en todo momento.

Romero fue posesionado como Vocal del TSE en noviembre del 2019 por la expresidenta Jeanine Añez. En más de una ocasión reiteró que Bolivia afronta el proceso electoral más complejo de su historia y tuvo que sortear más de una dificultad para llevar adelante las elecciones nacionales del 2020, sobre todo por las tres postergaciones que sufrió el proceso a raíz de la pandemia del coronavirus.