Roberto Ossio Ortube
06/02/2021 - 19:59

INNUENDO (1991) – TREINTA (30) AÑOS DEL ÚLTIMO DISCO DE QUEEN – EL ESPECTÁCULO DEBE CONTINUAR

El álbum final de QUEEN cumple treinta años desde su publicación el 4 de febrero de 1991, siendo el épico y dramático  epílogo de Freddie Mercury y de la legendaria banda británica.

El 4 de febrero de 1991 , QUEEN publicaría el que a la postre sería su último disco con Freddie Mercury vivo. La Tapa fue diseñada en base a los dibujos del ilustrador francés Grandville.

Los prolegómenos para este disco se encontraban marcados por el inminente final del vocalista, Freddie Mercury, quien fue diagnosticado con SIDA en la primavera de 1987 y sus médicos incluso auguraron que no pasaría de la Navidad de 1989.

Sin embargo, esto no ocurrió aunque Mercury estaba cada vez más enfermo, delgado y demacrado, las marcas empezaban a ser demasiado evidentes. Los rastros del sarcoma de Kaposi se hicieron dolorosamente más visibles y ni la barba o el maquillaje ocultaban los estragos producidos por esta cruel enfermedad.

Pero Freddie no quería ser abanderado de nada, su vida privada era eso: privada. Deseaba que se lo recuerde por su arte, por su música y que el público no compre sus discos por lástima o pena. Es por eso que se embarcó en uno de los trabajos más personales, elaborados y emocionalmente  mejor logrados de QUEEN, porque él y sus compañeros estaban plenamente conscientes que sería el último.

Roger Taylor, el baterista del grupo, lo dijo sin rodeos años después en una entrevista: “este disco fue una carrera contra la muerte”. Y sus sonidos y letras innegablemente hacen referencia a ella de forma brillante, conmovedora y en muchos momentos dramática. Pero eso no es todo, ante la debilidad de Mercury para hacer los videos musicales, QUEEN se dio el trabajo de realizar algunas de sus mejores obras audiovisuales de su dilatada trayectoria desde la Rapsodia Bohemia, recurriendo a las mejores técnicas y sofisticación posibles para su tiempo.

Producido por David Richards, grabado en los Olimpic Studios de Londres y en los estudios de Montreaux, Suiza, INNUENDO era lanzado con los dibujos del artista francés Grandville, donde en la portada un malabarista con cabellos en forma de sol, juega con los planetas y le regala a un sorprendido humano una banana.

Haciendo un acopio extraordinario de fuerza, Mercury junto con May, Taylor y Deacon se embarcan en la travesía final como grupo.

LAS CANCIONES

INSINUACIÓN (INNUENDO)

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La canción que da nombre al álbum, utiliza  un término muy elegante, hasta rebuscado en inglés viejo, casi schakesperiano, “INNUENDO” que significa alusión, insinuación, particularmente referido a lo sexual o muy personal que se hace demasiado evidente.

El inicio épico es el redoble de un tambor, que parece más el anuncio de una ejecución a cargo de un verdugo o un pelotón de fusilamiento, de esta forma con ritmo casi de un bolero, QUEEN vuelve a la formula clásica del rock conceptual de sus primeros álbumes de principios de los setenta, con letras elaboradas con profundo significado:

“Mientras vivimos según la raza, el color o el credo

Mientras gobernamos por la locura ciega y la codicia pura

Nuestras vidas dictadas por la tradición, la superstición, la falsa religión

A través de los eones y de vez en cuando”

La parte central fue dejada a un músico invitado Steve Howe de la agrupación YES, quien con guitarra clásica le da un aire marcadamente español flamenco, para luego dar lugar a la estruendosa guitarra de May.

La parte final es concluida por Mercury como un velado reproche a Dios:

“Si hay un Dios o cualquier tipo de justicia bajo el cielo

Si hay un punto, si hay una razón para vivir o morir

Si hay una respuesta a las preguntas que nos sentimos obligados a hacer

Muéstrate, destruye nuestros miedos, suelta tu máscara

Oh, sí, seguiremos intentándolo”

El magnífico video es dirigido por Hibbert Ralph y DORO Productions, quienes echan mano de todos los recursos posibles para su tiempo: animación sobre imágenes en movimiento del grupo en videos anteriores realizados entre 1986 a 1990, otorgando ciertas características a cada integrante: Mercury es dibujado al estilo de Leonardo Da Vinci, May es retratado con el toque de Monet, Taylor en las formas de Jackson Pollock y Deacon es ideado como una obra de Picasso.

También en forma de  dibujos animados se presentan las ilustraciones del artista francés  Grandville, que sirven para las tapas de portada y contracara del álbum y los simples. Imágenes de archivo reflejan la historia del Siglo XX, marionetas de plastilina en “stop motion” con la forma de arlequines con máscaras de nariz enorme, como se ven en el carnaval de Venecia y muñecas de terror tipo vudú en un teatro en miniatura, sentadas impávidas ante un escenario que muestra imágenes apocalípticas.

El video fue múltiplemente galardonado, incluyendo el Gold Camera Award de la American Film and Video Festival como el mejor video del año y la canción llegó directamente al No.1 en Gran Bretaña y en gran parte del Mundo.

ME ESTOY VOLVIENDO LIGERAMENTE LOCO (I’M GOING SLIGHTLY MAD)

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Mercury estaba decidido a dejar un testimonio del tiempo que le tocó vivir y lo hizo sin remilgos ni vueltas. Se sabe que la medicación para tratar el SIDA, así como las muchas restricciones y tratamientos, podían ocasionar cambios fisiológicos y psíquicos en el propio carácter. Algunos médicos hablan de una posible demencia producida por los trastornos que se presentan en el cuerpo provocados por la enfermedad. 

Con una voz sombría y baja, Mercury nos habla en voz casi de confidente sobre su estado mental,  la música logra magistralmente adentrarnos en los meandros de la locura, en el los laberintos de la insania, creando el ambiente que reina en los manicomios.

Esta canción fue ideada en una de las reuniones con su círculo más cercano, particularmente con su íntimo amigo Peter Straker, quien lo acompañó con frases disparatadas al piano en una reunión a mediados de 1990. Las letras son metáforas que parecen ilógicas y absurdas, pero que dicen mucho del  estado de ánimo de Freddie: 

“…. Una ola corta en un naufragio

….Una tetera que está hirviendo

…. Me creo un árbol de bananas

… Estoy tejiendo con un solo palillo

.. Estoy manejando con sólo tres ruedas

….Estoy volviéndome ligeramente loco, finalmente sucedió, si, finalmente sucedió, estoy ligeramente loco, pero muy ligeramente”

Nuevamente, el video es magistral, dirigido por Hannes Rossacher y Rudy Dolezal, los miembros de QUEEN aparecen disfrazados de personajes extraños: un arlequín (Deacon), una tetera hirviendo (Taylor), un pingüino gigante (May) y una especie de pierrot con el cabello alborotado (Mercury). Un buen camuflaje para disimular con toneladas de maquillaje que Freddie para marzo de 1991, estaba muy enfermo, pero que con este trabajo podía distraerse de su propia enfermedad.

Influenciados por el gran teatro inglés de Noel Coward, John Gilgeuld y otros referentes del Old Vic, QUEEN hizo uso de un sentido del humor irreverente pero elegante donde pingüinos reales  y un gorila casi se roban el show. Este fue el último video en el que Freddie estuvo directamente involucrado y al mando.

Este trabajo ha sido objeto de cientos de homenajes de los fans que asumen el video y el disfraz de Freddie como una forma de estar cerca del artista, de QUEEN y rendirles tributo. El ejemplo quizás más reciente fue el año 2019, cuando muchos cibernautas y youtubers fans de QUEEN, armaron videos aficionados de la película JOKER (Guasón), interpretado por Joaquin Phoenix, donde pusieron la canción de fondo para el tráiler…. era simplemente perfecta.

DE CABEZA (HEADLONG)

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Brian May tenía quizás la premonición que ya no existiría QUEEN para 1991 y pensaba incluir este tema para su primer disco solista ante lo inevitable, pero la canción estaba lista y Freddie pudo interpretarla, un rock de la vieja escuela, que fue el simple elegido para retornar a los Estados Unidos con su nuevo sello: Hollywood Records, con quienes se había negociado la redición de toda su discografía.

La prensa sensacionalista inglesa estaba a la cacería de Freddie y alegaba que estaba tan enfermo que los videos eran un collage de años atrás. Es por eso que el productor Jim Beach, presentó para la prensa, documentales cortos donde se ve al grupo frente a cámaras presentándose para desvirtuar especulaciones. El propio May viste una polera con la estampa de Bart Simpson para demostrar que el video es actual y no un reciclado pasado. En realidad una parte fue filmada el 28 de noviembre de 1990 y otra cuando Freddie vistiendo una sudadera amarilla fue grabado en enero de 1991.

Detalle curioso en estos documentales promocionales es que Freddie se muestra optimista aunque muy delgado y con reacciones que denotan lo incomodo que se sentía y hasta en cierta forma molesto: “Hagámoslo de una vez antes que olvide mi maldito nombre”…”Oh no!! debemos hacer esta misma mier.. otra vez”.

“De cabeza, fuera de control, es tan fuerte , que no podrás hacer nada al respecto”

NO PUEDO VIVIR CONTIGO (I can’t live with you)

Otra vez May con una melodía convencional y simple le dice  a su pareja con la voz de Freddie, que no puede vivir con ella pero que paradójicamente tampoco podía vivir sin ella. Se sabe que el guitarrista de QUEEN se encontraba siempre discutiendo y en una relación volátil con su novia (ahora esposa) Anita Dobson:

“A través  de la locura

A través  de las lágrimas

Seguiremos juntos  el uno al otro

Por millones de años

No puede vivir sin ti”.

NO LO INTENTES TANTO (Don’t try so hard)

Mercury nuevamente avasalla con sus letras y su alto registro vocal. Esta canción es otro maravilloso ejemplo de la voz abrumadora de Freddie, con palabras profundas donde simplemente reflexiona, sobre la vida que es corta y se debe valorarla sin sobresaltos:  

“Si estás buscando algo

No lo intentes tanto

Si no sientes nada

No lo intentes tanto

Cuando tus problemas parecen montañas

Sientes la necesidad de encontrar algunas respuestas

Puedes dejarlo otro día

No lo intentes tanto

Pero si te caes y te das una caída, no estará lejos

Si fallas, no debes quejarte

Agradece a tus estrellas de la suerte

Saborea cada bocado

Y atesora cada momento

Cuando las tormentas están enfureciendo a tu alrededor

Quédate donde estás

Oh, no lo intentes tanto

Oh, no te lo tomes todo a pecho

Son sólo tontos que hacen estas reglas

No lo intentes tanto”

PASEANDO EL VIENTO SALVAJE  (Ride the Wild Wind)

Taylor y su amor por los autos rápidos no podían estar fuera de este retorno de QUEEN a sus raíces. Más sofisticada que “Estoy enamorado de mi coche” de “Una Noche en la Opera” de 1975, QUEEN nos transporta a un auto descapotable donde el conductor y su novia recorren las carreteras a toda velocidad buscando huir de la realidad cotidiana:

“Átate el pelo cariño

Pasearemos esta noche

Tenemos fenómenos a la derecha - idiotas a la izquierda

A veces me deprimo tanto - simplemente tengo que pasear

Déjame tomarte la mano

Déjame ser tu guía”

TODA LA GENTE DE DIOS (All God’s People)

Esta canción es un remanente del trabajo de Mercury con Montserrat Caballe y Mike Moran para el disco BARCELONA de 1988, con pretensión de un tema con el mismo corte operático y coral, lamentablemente no puede lograrlo plenamente por las limitaciones impuestas por los sintetizadores, que bien pudieron ser reemplazados por una orquesta completa, pero, aunque no se crea, incluso Freddie Mercury o QUEEN tenían limitaciones económicas y de tiempo, así que no podían cubrir los costos de contratar a un grupo de músicos sinfónicos para sólo una canción.

La letra de este tema nos habla de la fe, la tolerancia para todos los que son la gente de Dios sin distinción alguna: “Gobierna con el corazón y vive con tu conciencia” clama.

ESTOS SON LOS DÍAS DE NUESTRAS VIDAS (These are the days of our lives)

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Un tema compuesto por Taylor pensando en sus hijos, de cómo van creciendo y con ello llega la nostalgia, pero el contexto y los tiempos en los que se grabó, determinaron que tuviese otro significado: la despedida  final de Mercury con QUEEN ante cámaras, grabando su último video musical en mayo de 1991.

Melancólico, reflexivo, con sabor agridulce, Mercury recuerda el paso del tiempo y la juventud perdida, adentrándose lenta y resignadamente al final:

“Esos eran los día de nuestras vidas,

las cosas malas en la vida eran tan pocas,

esos días se han ido, cuando veo  y encuentro que…

aun te amo”.

El video musical grabado por Hannes Rasacher y Ruddy Dolezal es un testimonio triste y al mismo tiempo revelador del final de la vida del vocalista, aunque refleja su inconmovible valentía. Mercury no quería la conmiseración de nadie y con estoico esfuerzo asistió por última vez a los estudios donde se grabaría el video. Su asistente de vestuario Diana Moseley, recuerda que para sus últimas presentaciones, ella se ocupaba de diseñar ropa extremadamente ligera para no lastimar su piel, porque le dolía hasta lo que vestía. El maquillaje en este video era muchísimo más pesado, puesto que las marcas en el rostro eran muy evidentes y el ojo izquierdo estaba notablemente dañado. Por ello se grabó al final íntegramente en blanco y negro.

Mercury subió al escenario con mucho cuidado, casi cojeando. Los asistentes debieron escribir a mano en letras grandes los textos de la canción para que pudiese verlos. El daño no sólo se limitaba a la vista, Brian May contó tiempo más tarde que alguna vez Freddie le enseño la pierna afectada y esta estaba muy deteriorada por lo que quedó notablemente impresionado y admirado por el valor de su amigo que no se quejaba ni permitía conductas de barata solidaridad, quería que todo siguiese igual.

No obstante sucedió el momento memorable y eterno, vestido con su chaleco donde estaban estampados sus amados gatos, Freddie ve de frente a la cámara y con una última sonrisa amable, simplemente dice “Aun los amo” y desaparece para no ser visto más.

DELILAH

Un tema dedicado a su gata favorita, Delilah, una narración de un día doméstico de Mercury en compañía de sus amigos felinos en su casa de Londres. Como todo gato, Delilah, juega, llora, se acurruca, rasguña y orina sus aposentos, desquiciándolo.

May, forzando su guitarra “red special” imita los maullidos y ronroneos de la gata, para complacer a su amigo, quien confirma explícitamente su amor a sus compañeros gatunos.

EL ASESINO (THE HITMAN)

QUEEN nuevamente rockea con estruendo, hablando de un “asesino” que quiere su vida y  no hay escapatoria, la canción trata de camuflarse en una parodia adolescente que hace referencia a un matón autosuficiente y bravucón, aunque la idea de este “asesino” en este contexto es otro, invisible, indestructible, letal y devastador.

BIJOU

El magnífico final del disco se acerca y el preámbulo es esta obra maestra de May que prácticamente hace llorar a su guitarra, como una despedida. La calidad de los solos retorna a su majestuosa esencia germinal en QUEEN II y Sheer Heart Attack.

Recapturando la magia de los primeros discos, May logra el efecto deseado, una declaración de amor eterna que recita Mercury y se diluye en el infinito:

“Tú y yo

Estamos predestinados

Estarás de acuerdo

El pasar el resto de nuestras vidas juntos

El resto de nuestros días como dos amantes

Para Siempre

Mi Bijou”

 

EL ESPECTÁCULO DEBE CONTINUAR (The show must go on)

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Compuesta por Taylor y May, lograron plasmar el momento final de QUEEN a la perfección y la brillante interpretación no deja lugar a dudas. Mercury estaba ya muy débil, sus amigos dudaron que pudiese cantar la canción, pero amoscado por los reparos de sus compañeros, con un trago de vodka encima, en una sola toma, Freddie dio lo mejor de sí.

Debería trascribirse prácticamente toda la letra de esta canción, que es espléndida, dramática, definitiva, cautivante, totalmente concluyente, pero se resume en esta estrofa:

“El espectáculo debe continuar,

por dentro mi corazón se rompe,

mi maquillaje quizás se hace pedazos,

pero mi sonrisa todavía permanece”

Sólo los grandes autores clásicos se atrevieron a algo tan épico, la voz de Mercury es increíble, clara, vibrante, adolorida, maravillosa y conmovedora, los últimos acordes son como un grito desgarrador. Como la Sinfonía No. 6  “Patética” de Piotor Ilich Tchaikovsky, INNUENDO termina como un corazón que late lentamente agonizando hasta desaparecer, con un lacónico y reiterado “continuar, continuar, continuar”

Este fue el último disco de QUEEN con Freddie Mercury vivo, la cuenta regresiva para el inevitable final empezaba y nada podía evitarlo.

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