El presidente del Tribunal Supremo Electoral (TSE), Salvador Romero, y de la Organización de Estados Americanos (OEA), tuvieron que interceder para que el Gobierno permita el ingreso al país del diputado argentino del Frente de Todos, Federico Fagioli, quien llegó al país como invitado del MAS para observar las elecciones.

En conferencia de prensa, el ministro de Gobierno, Arturo Murillo, afirmó que recibió llamadas telefónicas del presidente del TSE y de la OEA desde Washington solicitando dejar ingresar particularmente al diputado que fue observado por el gobierno transitorio.

No obstante, Murillo dijo que Fagioli "no es bienvenido" en Bolivia, ya que falseó información sobre lo acontecido en las protestas de Sentaka y Sacaba de 2019, luego del fraude electoral que terminó con la renuncia y salida del país del expresidente, Evo Morales.

Ayer, diversos funcionario del Gobierno argentino, incluido su presidente, Alberto Fernández, denunciaron que Fagioli fue retenido en el Aeropuerto del El Alto y exigió al Gobierno dar las garantías para el equipo de veedores del vecino país que llegaron a Bolivia para acompañar las elecciones de mañana.

Empero, Murillo  negó este sábado que se haya detenido al diputado argentino, Federico Fagioli, y aseguró que se garantiza la seguridad de todos los veedores e invitados internacionales a las elecciones generales de este 18 de octubre.

"Quiero dejar en claro que la seguridad de absolutamente todos los observadores y los que no son observadores, de los que ha invitado el MAS, está absolutamente garantizada en nuestro país, porque nuestro país es 100% democrático", aseveró Murillo en conferencia de prensa.

El ministro de Gobierno recordó que Fagioli no pertenece a ninguna comisión oficial de veedores de las elecciones generales, sino que es un invitado de la presidenta del Senado (MAS), Eva Copa.

"Jamás fue detenido ni estuvo preso ni nada por el estilo. Nosotros queremos decirle a todos los que quieren venir, que estamos con los brazos abiertos, a los veedores que quieran venir, aunque no sean de nuestra línea, lo único que pedimos es que no hagan injerencia", remarcó.