La Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen (FELCC) allanó las oficinas de la Agencia del Gobierno Electrónico y Tecnología de Información y Comunicación (Agetic); el jefe de la División Corrupción Pública, Luis Fernando Guarachi, informó que se encontraron indicios de que los llamados “guerreros digitales” del MAS, trabajaban desde estas oficinas.

El operativo se hizo en el edificio del Fondo Nacional de Desarrollo Regional (FNDR), la Agetic funciona en los pisos 4 y 5, funciona la Agetic. El operativo se justificó argumentando que se usa bienes del Estado para difundir mensajes de sedición en las redes sociales.

"En la intervención policial a estas oficinas que funcionaban en los pisos cuarto y quinto del Fondo Nacional de Desarrollo Regional (FNDR), se secuestraron discos duros, CPU, tabletas, celulares y otras evidencias", dijo el jefe policial.

Según Guarachi, se realizó un patrullaje cibernético para desbaratar páginas digitales y plataformas virtuales "sediciosas" tales como "resistencia y viejo cabrón" que enviaban mensajes contra el Gobierno de la presidenta Jeanine Áñez y de apoyo a las protestas de octubre y noviembre, tras la renuncia de Evo Morales; encontraron que una funcionaria pública estaba encargada de difundir esos mensajes. En el operativo se arrestó a la encargada de las redes sociales de la AGETIC y se convocó a varios funcionarios como testigos. 

"Los mensajes sediciosos estaban siendo difundidos mediante los guerreros digitales empleando computadoras que son bienes públicos del Estado", aseguró.

La Agetic es una oficina estatal que depende del Ministerio de la Presidencia, Nicolás Laguna era su director, actualmente está asilado en la residencia de México, y hay una orden de aprehensión en su contra en la investigación por el presunto fraude electoral en las elecciones del 20 de octubre.

Los llamados "guerreros digitales" se crearon para informar sobre los logros de la gestión del Gobierno de Evo Morales y así contrarrestar la información en contra durante la época de campaña electoral. El MAS aseguró que se trataba de jóvenes voluntarios; sin embargo la oposición denunció que cobraban sueldos de la dirección de redes, dependiente del Ministerio de Comunicación.