La presidenta de la Cámara de Diputados, Gabriela Montaño, y el senador de Unidad Demócrata (UD), Arturo Murillo, se enfrascaron en una guerra verbal que incluyó acusaciones de misoginia y sabotaje.

Todo empezó ayer, cuando Murillo señaló que la presidenta de la Cámara de Diputados debiera “estar callada” y no meterse en los asuntos del Tribunal Supremo Electoral (TSE), luego de que la autoridad del MAS dijera que no existe posibilidad de que Evo Morales sea inhabilitado.

“La presidenta (Gabriela) Montaño debería limitarse a estar callada y cumplir con sus labores y no meterse en las funciones de otro órgano (del Estado). Ella no tiene por qué meterse con el TSE a darle órdenes”, señaló Murillo.

La respuesta de Montaño no se dejó esperar y esta mañana, en rueda de prensa, lamentó las expresiones ‘misóginas’ del senador opositor.

“Ayer escuché una declaración lamentable del senador Murillo, una en que me manda a callar; puede ser que para él las mujeres tengamos que estar ‘calladitas’ y en la cocina, como ya dijo otras veces, pero este país ya ha cambiado senador Murillo, este país no es el que usted cree que tiene al frente, hoy tiene un país donde las mujeres merecemos respeto”, señaló Montaño.

Para la Presidenta de Diputados, el senador opositor “es un hombre que constantemente hace política con expresiones patriarcales y misóginas que nosotros no vamos a tolerar de ninguna manera, hoy las mujeres tenemos un Estado diferente y lo haremos respetar”, dijo.

Además, Montaño acusó al Senador de UD de tratar de sabotear las elecciones primarias y generales previstas para el 2019, a lo que Murillo respondió que “los únicos que quieren boicotear las elecciones son Evo Morales y Álvaro García Linera al no querer respetar la Constitución”, en referencia al resultado del referéndum del 21- F.