Tras un polémico inicio de año, después de que sorpresivamente decidiera dejar las filas de The Strongest para fichar por Bolívar, el lateral Diego Bejarano ha tenido un semestre de pesadilla, quizás el peor de su carrera deportiva.

Y es que el exatigrado, hasta ahora, no pudo demostrar su mejor nivel en la Academia, y cuando empezaba a encontrar su lugar fue aquejado por una serie de lesiones musculares que, a la postre, lo terminaron relegando al banco de suplentes.

Lo peor le pasó el sábado, cuando Bolívar ganó a Nacional Potosí por la mínima diferencia para pasar a las semifinales del Apertura.

Bejarano venía de recuperarse de una dolencia en el abductor de la pierna izquierda, que lo tenía a mal traer durante el último mes y medio.

Entró en el segundo tiempo y era su prueba de fuego para saber si sería incluido o no en la delegación que viajará a Chile para jugar ante el Colo Colo por la Conmebol Libertadores. Pero, cuatro minutos después de que entró a la cancha, tras una jugada fortuita, y con lágrimas en los ojos, tuvo que ser reemplazado.

Horas más tarde se confirmaría uno de los peores escenarios, sufrió un desgarro en el cuádriceps de la pierna izquierda. Su recuperación demandará al menos 30 días, por lo que el semestre terminó para el talentoso lateral.

"Me deja triste, con mucha rabia, impotencia porque la verdad que no esperaba esto, queria venir acá para triunfar y conseguir grandes cosas, y que me pase todo lo que me esta pasando no estaba en mis planes ni en mis metas”, señaló el lateral.

Empero, el fútbol da revanchas, dice un viejo adagio de este deporte, y Bejarano tendrá que esperar al torneo clausura para tratar de recuperar ese juego que lo llevó a jugar en Europa durante un par de temporadas.