La Policía Boliviana realizó un análisis psicológico de Juan Carlos H. B., a quien identificaron como el principal sospechoso de las explosiones en Oruro. Señalaron que “carece de culpa o remordimiento” y la Fiscalía no descartó que el motivo del atentado haya sido por un lío amoroso.

“La Policía presentó a la Fiscalía de Oruro el perfil-informe elaborado por una comisión de investigadores y se estableció una serie de elementos que tiene como base la escenificación, la reconstrucción del escenario el hecho”, explicó el director de la Fuerza Especial de Lucha contra el Crimen (FELCC) Jhonny Aguilera.

Los investigadores basan su acusación en el análisis de conducta y psicológico del acusado, quien testificó por horas ayer y finalmente se determinó su aprehensión. Señalaron que “carece de sentimiento de culpa o remordimiento, tiene una afectividad frívola y baja repuesta emocional”, esto porque su concubina y su hija murieron en la detonación y él no habría tratado de ayudarlas. Sería el único sobreviviente que estuvo en el lugar donde se colocó la carga explosiva y, de acuerdo a Aguilera se identificaron “serias contradicciones sobre tiempos y lugares” en su actuar del 10 de febrero, día en que ocurrió la primera explosión en Oruro.

El resultado sería que tiene una conducta patológica manipuladora y una tendencia a mentir de forma patológica. Este informe sería enviado al Ministerio Público. Éste, por su parte sostiene que el móvil para el crimen sería un problema amoroso.

El fiscal de Oruro, Mario Rocha, señaló que el acusado era yerno de la dueña del carrito de comida. “Se estableció que Juan Carlos y su cuñada tenían unan relación amorosa, por lo cual el sindicado provocó la explosión con el único fin de deshacerse de su concubina y su hija”. Se habría evidenciado también que existen llamadas entre el acusado y la hermana de la concubina y encuentros en proximidades del hospital donde fueron llevadas las victimas

La imputación formal sería por feminicidio, asesinato y lesiones.

Publicaciones en Facebook 

En concordancia con dicho estudio psicológico, el director de la Unidad Anticorrupción de la FELCC, Miguel Ocampo, señaló que el acusado habría publicado una imagen del personaje Freezer de la serie animada Dragon Ball, al que describió como “bastante sanguinario y que mata a sus víctimas sin ninguna razón, etcétera”. Ocampo consideró que esto da “la impresión de que en ese momento él quería expresar algo similar”.

Además, puntualizó que el acusado había escrito en su muro de Facebook “unos fuman, otros bebe, otros se drogan y otros se enamoran, cada quien se mata a su manera”, esta información también será presentada al Ministerio Público, como parte de la investigación.