El Real Madrid sufrió más de lo esperado para meterse en la final del Mundial de Clubes
El madrid empezó perdiendo. Ronaldo y Bale evitaron la catástrofe.
El Real Madrid sufrió, y mucho, para eliminar al Al Jazira. De hecho, tuvo que dar la vuelta el resultado y ahora se medirá ante Gremio en la final del Mundial de Clubes, el próximo sábado.
Contra todo pronóstico el equipo de los Emiratos Árabes arrancó ganando, pero Cristiano Ronaldo y Bale pusieron las cosas en su lugar en el segundo tiempo y ganaron los españoles por 2 a 1.
El primer tiempo culminó con la sorpresa más grande de los últimos tiempos a nivel futbolístico con la ventaja para los locales en Abu Dabi. Ya había amenazado con un remate de Ali Mabkhout y al Real le anularon un gol por el VAR. Casemiro cabeceó, la pelota dio en el defensor y entró, pero Benzema estaba adelantado y tuvo participación en la jugada al tocar al defensor de atrás.
El gol llegó por un error de la defensa de los europeos bien aprovechado por Al Jazira. Mbark Boussoufa le ganó la pelota a Achraf Hakimi, que por no despejar le dejó la chance de prosperar en el terreno, el 10 abrió para Romarinho que definió bien ante la marca de Varane. Sorpresa mundial.
El complemento estuvo lejos de ser prometedor para el Real. A los cinco minutos, Ali Mabkhout recorrió junto a Mbark Boussoufa unos cuarenta metros con la defensa del Real persiguiéndolos.
El 7 esperó a que le salga el arquero Navas y abrió para el 10 del equipo emiratí que la empujó (en posición adelantada milimétrica) y salió festejando. Otra vez el juez anuló la jugada con la utilización del VAR.
A los pocos minutos apareció Cristiano Ronaldo para el empate. El portugués encontró un pase de Luca Modric de espaldas, giró y remató cruzado para dejar sin oportunidad al arquero Khaled Alsenaani, quien entró por el lesionado capitán Ali Khaseif.
A partir de allí las situaciones para los españoles se sucedieron. Una tras otra. Sólo el arquero y las falencias propias de los merengues (hoy de negro) le dieron vida al equipo local que lamentó muchísimo la situación desperdiciada. Y el gol del desequilibrio finalmente llegó a los 36' con un zurdazo de Gareth Bale tras una buena jugada colectiva.