Venezuela acusa a EE.UU. de "terrorismo psicológico"
Este domingo, el presidente estadounidense, Donald Trump, reemplazó su polémico veto migratorio a seis países de mayoría musulmana con un decreto que impone restricciones a ocho naciones, entre las que figura Venezuela.

El gobierno de Venezuela, a través de un comunicado, rechazó la decisión de Estados Unidos de incluirlo en una lista de países con restricciones para viajar a territorio estadounidense y acusó al Gobierno estadounidense de realizar un “terrorismo psicológico y político” en la región.
"La República Bolivariana de Venezuela rechaza categóricamente la irracional decisión del Gobierno de los Estados Unidos de América de catalogar una vez más al noble pueblo venezolano como una amenaza terrorista y al orden público estadounidense", señaló el gobierno a través de un comunicado emitido por la Cancillería de Venezuela.
En el texto, el vecino país condenó, además, la promulgación e implementación de medidas que consideran "coercitivas unilaterales, en flagrante violación de los propósitos y principios consagrados en la Carta de las Naciones Unidas, del derecho internacional, y de las normas que deben regir las relaciones de amistad y cooperación entre los Estados".
Asimismo, el gobierno venezolano denunció ante la comunidad internacional "las acciones inamistosas y hostiles del Gobierno de Estados Unidos de América, las cuales buscan estigmatizar a nuestra nación con el pretexto de la lucha contra el terrorismo, al incluirla en una lista elaborada unilateralmente y en la que se acusa a otros Estados de ser supuestos promotores de este terrible flagelo".
Según el comunicado, es claro que este tipo de listas "son incompatibles con el derecho internacional y constituyen en sí mismas una forma de terrorismo psicológico y político. Se sanciona a nuestro pueblo, además, por su vocación pacifista, así como por su tolerancia y respeto a las distintas religiones y creencias que son profesadas libre y armoniosamente en nuestro país".
Finalmente Venezuela manifiesta su repudio a "las conductas imperiales" de Estados Unidos "e informa que, con arreglo al principio de reciprocidad, considerará todas las medidas necesarias para defender el interés y la soberanía nacional".