Analgésica, antibacteriana, antihistamínica, cicatrizante, antifúngica, hepatoprotectora, antiparasitaria, antiinflamatoria, expectorante y diurética son algunos de los beneficios que ofrece la cúrcuma cuando es consumida diariamente en la dosis de una cucharilla como máximo.

La cúrcuma es una planta utilizada como especia en la cocina para platos y en tés, tiene un color amarillo vistoso y es usada en la medicina herbolaria. “Tiene nutrientes como: proteínas, fibra dietética, niacina, vitaminas C, E y K, sodio, potasio, calcio, cobre, hierro, magnesio y zinc”, explica el nutricionista Carlos Santiago.

Esta planta es empleada en Asia dentro de la medicina natural desde hace miles de años por sus propiedades a favor de la salud y el uso, poco a poco, se extiende en occidente.

“Este alimento además le da luminosidad a la piel por su poder de desintoxicar el hígado. Además, por su poder cicatrizante, los médicos chinos suelen realizar cataplasmas en heridas para que no se infecten y cicatricen rápidamente”, comenta el profesional.

En Bolivia, se puede conseguir el producto desde Bs 15 en tiendas naturistas o de alimentos saludables.