Tras la marcha efectuada por la ciudad de La Paz exigiendo la renuncia de su alcalde Edgar Ramos, los vecinos de Achacachi se quedarán en la ciudad y continuarán con las medias de presión mañana. De no ser escuchados advierten con radicalizar sus medidas. 

“Nos estamos quedando en la ciudad de La Paz, el día de mañana vamos a radicalizar las medidas dado que el Gobierno no nos ha dado el espacio que probablemente debería, a esta multitudinaria marcha, hemos sido congelados por el Gobierno central”, señaló el presidente de la Federación de Juntas Vecinales de Achacachi (Fejuve), Eznor Condori. El paro indefinido en Achacachi continúa. 

Condori indicó que una comisión se reunió con el Ministro de Desarrollo Rural y Tierras, César Cocarico, pero que la respuesta de éste fue que se tiene que reunir con los ministros de la Presidencia y de Relaciones Exteriores para acordar una respuesta. También les habrían enviado una misiva invitando al diálogo, pero el dirigente explica que nunca les notificaron la fecha y la hora para el mismo.

La movilización llegó después de dos días de paro cívico en Achacachi y tras romper el diálogo con los comunarios “ponchos rojos” la semana pasada. Condori manifestó que las negociaciones se habían roto por incumplimiento del Defensor del Pueblo y de las autoridades que debían ser mediadoras. 

El Defensor del Pueblo, David Tezanos, señaló que el diálogo se rompió porque la presencia masiva de los vecinos de Achacachi “afectaba” las condiciones del diálogo; además los vecinos denunciaron incumplimiento del Acta de Garantías por parte de los “ponchos rojos”. Por su parte, éstos emitieron un voto resolutivo con el que se alejaban del diálogo aduciendo afectación por un paro cívico convocado por los vecinos.

Tezanos aclaró que en el Adjunto Juan Carlos Ballivián y el jefe de conflictos Sandro Delgado estuvieron el día programado para la mesa de negociación en representación de la Defensoría del Pueblo.

El conflicto entre los vecinos y los comunarios "ponchos rojos" de Achacachi ya lleva un mes, los vecinos piden la renuncia del Alcalde y los comunarios lo respaldan.