El vicepresidente Álvaro García Linera defendió esta mañana, en conferencia de prensa, el modelo económico del gobierno, frente a las críticas del político opositor Samuel Doria Medina, en su texto “Crisis del neocapitalismo de Estado”. La autoridad calificó el texto como “la confesión de un fracasado” y aseguró que su propuesta es antisocial, antiproductivista y antindustrializadora.

El vicepresidente comenzó por asegurar que “En el Proceso de Cambio, el dinero que genera el Estado se convierte en bienestar para la población”, luego criticó el análisis, las cifras y las recomendaciones que plantea Doria Medina en su texo.

García Linera aseguró que la dinámica del mercado interno ha sido el principal motor del crecimiento económico del país, esto al refutar la idea de que Bolivia es un país extractivista.

“Existen actividades económicas fuera del extractivismo: manufactura, agricultura, transporte, comercio, construcción y telecomunicaciones que son el motor de la economía boliviana. La economía boliviana es mucho más que extractivismo, mucho más que primaria exportadora, es una economía que empieza a diversificarse en otras áreas”, aseguró.

También resaltó toda la inversión que realizó el gobierno en la industrialización de hidrocarburos, y litio, aseguro que “somos un país que estamos empezando a industrializarnos”; subrayó el apoyo al sector privado, con las subvenciones a los hidrocarburos: gasolina y diesel.

Defendió la política salarial gubernamental a la que Doria Medina llamó populista, y afirmó que el gobierno lucha porque los trabajadores tengan un salario mínimo digno. “A este hecho de justicia, Doria Medina le llama populismo, porque él quisiera pagar 77 bolivianos como salario mínimo; estamos orgullosos de un salario mínimo de 1.600 bolivianos y nos critica de que tenemos políticas populistas para con el salario, tenemos políticas justas y redistributivas, un país sin justicia social no es un país estable”, aseguró.

Sobre la deuda externa afirmó que cuando Doria Medina era ministro llegaba al 77% del Producto Interno Bruto (PIB) y en la actualidad alcanza solo el 19 %. Finalmente rechazó que exista una desaceleración de los sectores que apoya el gobierno, y aseguró que el sector privado “está ganando y como lo hace, puede compartir su riqueza. Hemos venido a gobernar para los trabajadores”, enfatizó.