Nicolás Maduro, presidente de Venezuela, ha decretado estado de excepción y emergencia económica ante la posibilidad de un “golpe” contra su Gobierno. El decreto es un intento de apaciguar la presión popular que busca activar un referendo que ponga fin a su mandato. Maduro aseguró que toma la medida “para proteger a nuestro pueblo”.

Aun no se conoce el alcance de esta medida, en su discurso el presidente venezolano explicó que la medida servirá para evitar una conspiración contra su Gobierno y recuperar la capacidad económica: “Esto nos permite durante los meses de mayo, junio, julio, y toda la extensión que vamos a hacer constitucionalmente durante el año 2016 y seguramente el año 2017, recuperar la capacidad productiva del país”, explicó.

En las últimas semanas la oposición ha activado el proceso para iniciar un revocatorio, también se han registrado saqueos a supermercados y camiones, la comunidad internacional, incluido el Papa, han expresado su preocupación por la situación de Venezuela; la OEA considera convocar a un consejo de emergencia. El presidente Maduro ve una intención de derrocarlo; durante el anunció expresó:

"He decidido aprobar un nuevo decreto de estado de excepción y emergencia económica que me dé el poder suficiente para derrocar el golpe de Estado, la guerra económica, para estabilizar socialmente nuestro país y para enfrentar todas las amenazas internacionales y nacionales que hay contra nuestra patria en este momento”.

Para hoy, se han convocado a dos concentraciones en Caracas. El oficialismo y la oposición saldrán a las calles para mostrar su postura ante el mandato del sucesor de Chávez. No se sabe como afectará el decreto a las marchas convocadas y se espera que no se produzcan enfrentamientos.