La Paz, 12 de diciembre (Oxígeno).- "Son unos hipócritas, son doble moral, obviamente el tole tole electoral político no es sincero, no están buscando seguir la corrupción, aquí lo que hacen es hacer un daño político, pero creo que lo que el Gobierno ha mostrado ejemplarmente es como se lucha contra la corrupción", señaló el ministro de Defensa, Reymi Ferreira, al referirse a las declaraciones que realizaron  legisladores de la oposición a la cadena CNN en Español sobre el caso de corrupción en el Fondo Indígena Originario Campesino (Fondioc).

La nota publicada por CNN denominada 'Millonario escándalo de corrupción en Bolivia', hace referencia a que: "En Bolivia, más de 200 personas están procesadas y varias detenidas en el caso de presunta corrupción en el ya extinto Fondo Indígena, uno de los más destacados durante el gobierno del presidente Evo Morales".

En la publicación la diputada de la opositora Unidad Demócrata (UD), Jimena Costa, señaló que "el Fondo Indígena ha sido instrumentalizado" con fines políticos.

Asimismo, el diputado de UD, Tomás Monasterio, indicó que ese caso "demuestra que la corrupción se ha institucionalizado en el Gobierno".

 Según Ferreira, "es una falacia, es una gran mentira" la versión de la oposición.

Asimismo, recordó que la administración del presidente Evo Morales "es el único en la historia del país que ha metido presa a gente que pertenece al partido de Gobierno"

"Cuándo ha visto un exministro neoliberal tras las rejas, cuándo han visto personas de altas esferas políticas detenidas, nunca", manifestó.

En esa dirección, observó que la oposición no hace nada para que exautoridades como Humberto Roca, Mario Cossio, Manfred Reyes Villa y otros, que fugaron del país con denuncias de malversación de fondos, sean extraditados para que sean procesados por ese delito, informó la Agencia Boliviana de Información.

En febrero pasado se denunció el caso Fondo Indígena, tras que la Contraloría evidenció 153 obras inconclusas o inexistentes que causaron un daño económico al Estado por 71 millones de bolivianos, casos que son investigados.