La Paz, 4 de agosto (Oxígeno).-  El presidente del Senado y ex cónsul de Bolivia en la Argentina,  José Alberto Gonzales,  acusó este martes al  cónsul general de Chile  en Bolivia, Milenko Skoknic, de conspiración contra al Estado Plurinacional y  pidió a la Cancillería chilena cesarlo inmediatamente de sus  funciones o el gobierno boliviano procederá a declararlo persona no grata, lo que significaría que debe irse del país.

 En una entrevista con el periódico El Deber, el presidente del  Estado, Evo Morales,  dijo que desconfía del cónsul de Chile en Bolivia  debido a que sospecha de las acciones del diplomático en el país, incluso abrió la posibilidad de declararlo persona no grata.

"Si los chilenos detectaran que nuestra cónsul,Magdalena Cajias, estuviese en actividades  de favorecer a fuerzas que estuvieron en contra de los intereses chilenos o que vayan en contra de la presidente Bachelet, seguramente la echarían sin ningún tipo de contemplación y nosotros vamos hacer lo mismo" , advirtió.

 Como ex diplomático ahora en función legislativa, Gonzales explicó que las funciones de un cónsul en un país son limitadas, por lo tanto no pueden transgredirse  ni abordar otros ámbitos que  no son de su competencia.

“Entonces si un ciudadano transgrede los límites, lo que corresponde es que se lo declare persona non grata (...)  Si tú tienes la intención  de tener una buena relación con un país no le mandes a tu cónsul a hacer conspiración”, dijo el presidente del Senado.

Consultado sobre si una disculpa pública o mediática solucionaría este nuevo impasse diplomático entre Bolivia y  Chile, Gonzales indicó que la única salida para el estado boliviano es que el  gobierno chileno  lo convoque y le pida el cese sus funciones.

 Además señaló que ninguna autoridad diplomática da un paso sin que el Ministro de Relaciones Exteriores lo sepa. “Es como las Fuerzas Armadas, no tienes un milímetro de desacatar, así que  el cónsul Skonic, vuela por su propia cuenta  (…) o la cancillería de Chile le manda hacer estas cosas”.

“Las disculpas  no cuentan, son señales las que se mandan en diplomacia, si la cancillería de Chille detecta que se está extralimitando y está haciendo vuelo propio, debe inmediatamente cesarlo. La forma de pedir disculpas es cesándolo al señor”, complementó  Gonzales.

Las relaciones bilaterales entre Bolivia y Chile fueron interrumpidas en 1978 y luego fueron repuestas, pero únicamente a nivel de consules generales, quienes generalmente tuvieron el rango de embajadores, aunque no ejercían dichas funciones.

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