La Asamblea General de la Organización de Naciones Unidas (ONU) aprobó por abrumadora mayoría la resolución que exige poner fin del bloqueo que mantiene Estados Unidos (EE.UU.) contra Cuba hace más de 60 años.

Tras un año de pausa por la pandemia, Cuba volvió a llevar ante Naciones Unidas su denuncia del embargo. Cabe señalar que la ONU  viene aprobando anualmente desde 1992  resoluciones contra el bloqueo estadunidense.

En esta ocasión, el texto salió adelante con 184 votos a favor (incluido el de Bolivia), dos en contra (EE.UU. e Israel) y tres abstenciones (Colombia, Ucrania y Emiratos Árabes Unidos).

Embajador de Bolivia en la ONU: “El bloqueo contra Cuba es ilegal”

Durante su intervención en la Asamblea General de la ONU, el embajador de Bolivia ante la Organización de las Naciones Unidas, Diego Pary, pidió que el bloqueo de EEUU a Cuba se levante por ser ilegal, inhumano y contrario a las normas internacionales.

“El bloqueo contra Cuba es ilegal, no es un asunto bilateral, es una amenaza al multilateralismo. El bloqueo es agresivamente extraterritorial y una grave violación del derecho internacional que lacera la soberanía de todos los Estados”, indicó.

Aseguró que el bloqueo estadounidense también es una transgresión de las normas internacionales de comercio y de la libertad de navegación. Además, dijo que la inclusión de medicinas y alimentos en el bloqueo representa la vulneración de los más básicos derechos humanos y el derecho internacional humanitario.

“Hoy, no sólo votamos contra ese inmoral bloqueo económico, comercial y financiero. Votamos por la esperanza, por la posibilidad de hacer un mundo más justo. Por ello, Bolivia se une a la voz de los pueblos libres del mundo que pide, reclama y exige que el bloqueo inhumano, unilateral e impuesto por los Estados Unidos se levante”, aseveró el embajador boliviano.

Según información oficial del Gobierno de Cuba, las afectaciones del bloqueo económico, comercial y financiero impuesto por EEUU provoca severas afectaciones sobre los esfuerzos nacionales para contener la pandemia y paliar las consecuencias económicas y sociales derivadas de la misma.