Argentina enfrenta la mayor investigación de corrupción que involucra a empresarios y al gobierno de los Kirchner
En medio del escándalo por las coimas de empresarios a exfuncionarios de su gobierno, Cristina Kirchner apareció en un acto público, el juez de la causa pidió el allanamiento de la casa y la oficina de la expresidenta.
El juez argentino Claudio Bonadio pidió al Senado el desafuero de la expresidenta argentina Cristina Fernández de Kirchner, a quien citó como acusada en una investigación sobre supuestas coimas millonarias, para el 13 de agosto.
La Policía argentina detuvo el 1 de agosto por orden judicial a Roberto Baratta, ex mano derecha de Julio De Vido, ministro de Planificación Federal en los gobiernos de Néstor Kirchner (2003-2007) y Cristina Fernández (2007-2015), en el marco de una investigación sobre supuestos sobornos. Además se detuvo a más de una decena de empresarios y exfuncionarios.
El juez Bonadio rechazó este viernes los pedidos de excarcelación de empresarios y exfuncionarios detenidos porque podrían poner en riesgo las medidas de prueban que restan realizar y que, debido a los vínculos que tienen los detenidos, existe la posibilidad de que se den a la fuga.
A quien le otorgó la libertad, es al chofer Oscar Centeno, quien declaró en calidad de "arrepentido" y cuyos cuadernos con 10 años de anotaciones de supuestos movimientos de bolsos con dineros entre empresarios y exfuncionarios derivaron en la investigación y la detención.
El exchofer de Roberto Baratta, exmano derecha de Julio De Vido en el ministerio de Planificación Federal, dijo temer por su vida y la de su familia luego de las revelaciones, la justicia lo ingresó en el programa de protección a testigos.