Líderes políticos mexicanos pidieron al presidente Enrique Peña Nieto cancelar la reunión con Donald Trump, programada para la próxima semana, ante lo que consideran una política hostil del gobierno de  EEUU; su presidente firmó hoy dos decretos en la sede del departamento de Seguridad Nacional en los que se establece la construcción de un muro en la frontera con México y el endurecimiento de las leyes contra el ingreso de inmigrantes indocumentados.

En respuesta, el líder de izquierda del Movimiento de Renovación Nacional (Morena), Andrés Manuel López Obrador, fue más allá y anunció que acudirá a los tribunales internacionales.

"Su muro nos agrede y deja la Estatua de la Libertad como leyend. Iremos a tribunales internacionales. Viva la fraternidad", escribió en su cuenta de Twitter.

Trump firma el documento, mientras una misión de alto nivel del gobierno de Enrique Peña Nieto, liderada por el canciller Luis Videgaray, comenzaba reuniones con funcionarios de la Casa Blanca, en Washington, Reince Priebus, jefe de gabinete de Trump, y Jared Kushner, asesor de la Presidencia y esposo de la hija del mandatario.

El gobierno mexicano no ha emitido hasta el momento ninguna comunicación oficial; en cambio Cuauhtémoc Cárdenas fundador del Partido de la Revolución Democrática (PRD), dijo que Trump, "estará recibiendo a Peña Nieto con un portazo en la nariz".

El gobernador del Estado de Guanajuato, Miguel Márquez, donde se encuentran ubicadas las fábricas de las empresas automotrices Ford, Honda, Mazda, Toyota y BMW, también pidió cancelar la visita, porque "no se vale que te reciban así, México tiene dignidad, soberanía y con qué jugar, hay que hacer valer nuestro poder de compra y consumo".

El excanciller mexicano Jorge Castañeda dijo que Trump "pudo haber hecho su anuncio después y no en la víspera de la llegada de los secretarios de Estado mexicanos, es indignante".

LA ORDEN DE TRUMP

El presidente de EEUU, Donald Trump, firmó este 25 de enero dos órdenes ejecutivas para redoblar los controles migratorios y fortalecer la seguridad fronteriza. La orden ejecutiva quitará los subsidios federales a aquellas ciudades cuyas administraciones son proclives a albergar inmigrantes ilegales.

"El secretario, a través del director de Migración y Control de Aduanas, deberá, dentro de lo permitido por la ley y sujeto a la disponibilidad de las partidas, tomar todas las acciones tendientes a contratar a 10.000 funcionarios de migración adicionales", dice la orden.

Las ciudades identificadas que se caracterizan por no aplicar leyes federales que persiguen penalmente a los migrantes son Chicago, Houston, Los Ángeles, Miami, Nueva York y Washington D.C.

La orden ejecutiva también establece que solo se otorgarán visas a los países que acepten de regreso a sus ciudadanos que hayan cometido delitos en EEUU, informó el portavoz de la Casa Blanca, Sean Spicer, que aclaró que la medida no se aplica a los "soñadores", inmigrantes que llegaron a EEUU sin documentos cuando eran niños.