La denuncia presentada por los Obispos se refiere a las autodenominadas “Iglesia católica apostólica nacional boliviana” y la "iglesia católica apostólica renovada en Bolivia”.
La dirigente recordó que el 25 de mayo, el sector sufrió una represión violenta en la que los Policías usaron gases lacrimógenos y los carros Neptuno para lanzarles grandes chorros de agua.
Una activista afirma que la solución para resguardar a los canes callejeros no son los albergues ni los bebederos ni comederos instalados en la calle, sino los hogares temporales y la adopción.