Santa Cruz, 09 de julio (ABI).- A un día de la celebración de la única misa que el papa Francisco oficiará en Bolivia, una anciana, Hortensia Espinoza Díaz, decidió ocupar una silla de la primera fila del palco preparado al frente del altar papal y afirmó que no se moverá hasta el jueves.

Oriunda del departamento andino de Potosí, explicó que viajó desde su región para participar de los actos que tiene previsto cumplir el Sumo Pontífice, sobre todo de la misa. "Me voy a quedar, es mi intención quedarme aquí, ahora voy a sacar mi credencial, que dice que debo tener, estoy esperando que alguien cuide mi asiento, pero voy a dormir acá", afirmó la anciana.

Según los organizadores, ese sector está preparado para las personas de la tercera edad e inválidos y se prevé que el Santo Padre tenga un contacto directo con esas personas.

A pesar de que ella no tiene una acreditación, dijo que "tiene fe" de que le permitan quedarse en ese espacio porque quiere ver de cerca al Sumo Pontífice "para que le brinde sanidad y bendición  "Ni aunque llueva, yo me quedo, yo no me muevo de aquí", sentenció.