El alcalde de La Paz, Iván Arias, aseguró este martes que la Alcaldía de La Paz no autorizó la instalación de ningún mercado campesino a la Asociación de Productores Illimani, en un predio privado en la Av. Hernando Siles de Aranjuez, y mucho menos, aseguró, la existencia de una norma que respalde ese accionar.

“Alegan una resolución municipal. Vuelvo a aclarar, la Alcaldía no ha dado ningún permiso, licencia, autorización para que se construya un mercado campesino”, afirmó Arias.

La autoridad, en ese sentido, lamentó que exista en la ciudad hechos como el que protagonizan los productores de la Asociación de Productores Illimani, de ocupar una propiedad de la Fundación Arco Iris y destinada a la construcción de un complejo hospitalario.

Para la autoridad edil esa actitud como varias otras es una muestra del “tiempo de avasallamiento”, que se está viviendo en el municipio, solo porque alguien dijo que existía una presunta autorización para construir un mercado campesino.

“Estamos viviendo el tiempo de los avasallamientos y del irrespeto a la norma que nos pone en peligro a las autoridades nacionales, municipales o departamentales. Es aquí como si fuera tierra de nadie. Hacen lo que te da gana y si tienes plata podrás vivir feliz”, reclamó.

También recordó que hace más de una semana y a raíz del proceso judicial que empezó la Fundación Arco Iris por la toma de su propiedad, se efectuó un operativo para recuperar esos predios con el apoyo de 20 efectivos policiales, sin embargo, fue resistido por los productores, quienes  mantienen su ocupación.

El burgomaestre afirmó que no hay fuerza policial ni judicial que pueda mover a quienes ocupan un predio privado en Aranjuez. “Algún juez, alguien dice que hay una norma. El otro día han ido con fiscales, nadie los puede sacar”, dijo Arias.

Desde el mes pasado y tras la toma de esos predios, la subalcaldesa de Mallasa, María del Carmen Navarro, tomó cartas en el asunto y se reunió con los productores. En una reunión realizada el 25 de mayo, se les explicó que el área que ocupan es privado y se pidió que retirarán sus animales de granja del área verde aledaña al predio tomado y los vehículos que habían estacionado para comercializar sus productos. Además se solicitó que dejarán se usar el sector como dormitorio y baño.

Por otra parte, con la finalidad que se retiren del área tomada se les ofreció dos áreas para que realicen ferias productivas, pero rechazaron la oferta. El primer ofrecimiento consistió en brindar un  espacio en la Subalcaldía de Mallasa y que es utilizado como campo ferial, que podían usar una o dos veces a la semana para hacer ferias. El segundo predio ofrecido fue otro en el macrodistrito, pero que también fue descartado porque dijeron que era pequeño, además querían las áreas en propiedad.