La Paz: Vuelven Las Cebras y Arias les pide buscar a ciudadanos que hacen buenas acciones
En una primera etapa participan 50 jóvenes voluntarios en situación de vulnerabilidad que se capacitaron desde hace un mes para formar parte de Las Cebras. Posteriormente se tiene previsto, y con la cooperación de organismos internacionales, que el número de educadoras incremente a más de cien.
Las Cebras vuelven a La Paz con un programa renovado y denominado ‘Encébrate’, en la que el querido personaje inculcará valores, una cultura de paz, educación vial, fomento a la cultura y turismo. A todo ello, el alcalde Iván Arias les pidió convertirse en “cazadores de personas que hacen bien”, cuyas experiencias positivas serán publicadas semanal y mensualmente.
“Las Cebras desde ahora y bajo el Programa ‘Encebrate’ van a ser cazadores de personas que hacen bien y vamos a publicar semanal, mensualmente porque los valores en esta ciudad no tiene que perderse”, dijo el alcalde Arias, durante el lanzamiento de este programa municipal que se efectuó en plaza Camacho.
Las Cebras buscarán a las personas que cuidan el ornato público, como un ciudadano que hace unos días limpiaba una de las pinturas del Viaducto Belisario Salinas y con quien conversó el alcalde Arias.
Se acercó y le preguntó qué estaba haciendo. “Estoy llorando, como van a destruir la plaza si recién se ha inaugurado y él estaba borrándolo. Eso es encebrarse, eso es amar la ciudad, eso es valorar las acciones positivas. Esa va a ser una de las cosas que van a hacer las cebras también”, aseguró Arias.
En una caminata, Las Cebras recorrieron este miércoles las principales calles desde Plaza Bicentenario hasta la plaza Camacho donde se realizó el programa oficial de relanzamiento del programa “Cebras Educadores Urbanas 2022”. Las principales autoridades del municipio y la población en general dieron la bienvenida al entrañable personaje.
En una primera etapa participan 50 jóvenes voluntarios en situación de vulnerabilidad que se capacitaron desde hace un mes para formar parte de Las Cebras. Posteriormente se tiene previsto, y con la cooperación de organismos internacionales, que el número de educadoras incremente a más de cien.
Durante la capacitación, los nuevos integrantes se formaron en manejo de técnicas artísticas para llegar a los más pequeños del hogar. Se reforzó la capacitación en medidas de bioseguridad. Las Cebras estrenaron una nueva coreografía y una canción que las identifica como patrimonio de la ciudad de La Paz. Desde ahora estarán en las calles, realizando el trabajo diario en beneficio de la ciudadanía.
El secretario municipal de Culturas y Turismo, Rodney Miranda, explicó que los jóvenes que son parte del programa recibirán una capacitación en diferentes especialidades con el fin de acceder a un programa de reinserción laboral y mejorar su calidad de vida.
“Aparte de concientizarnos en educación vial y ciudadana, se van a formar y capacitar para que ellos no se queden como cebras, sino que continúen con su formación que les permita tener una mejor calidad de vida y una oportunidad laboral”, manifestó.
Miranda informó que la capacitación de Las Cebras contará con el apoyo de Save The Children y la Fundación Alalay. “Vamos a tener programas de capacitación para que ellos al próximo año no se queden como cebras, empiezan un camino laboral que les permita tener un futuro mejor. Entonces, ahora ser cebra es también sinónimo de formación, sinónimo de reinserción laboral”.
El alcalde de La Paz reveló que Las Cebras trabajarán en educación y cuidado forestal, por eso se vio durante el lanzamiento cebras con trajes verdes. Asimismo, en esta jornada el burgomaestre, Las Cebras y el burro bailaron la cumbia de los educadores urbanos.
El concejal Oscar Sogliano recordó que el programa Educadores Urbanos nació hace 21 años y enseñó a la población valores ciudadanos y se convirtieron en “un icono” en la ciudad de La Paz.
Las Cebras son como la marraqueta y el Illimani, “son como el PumaKatari, son parte del ajayu, del alma de la ciudad de La Paz”, remarcó.
“Es un día de regocijo porque hace 21 años, los educadores urbanos enseñaron a esa generación como era pasar por las calles en verde, respetar el paso de cebra y fundamentalmente, las normas. Esa generación seguramente ha crecido con nuevos valores, nuevas perspectivas de la ciudad, amando y queriendo la ciudad”, dijo Sogliano.