Al menos 400 familias de las comunidades de Mecapaca, Jupapina, Palomar, Huajchilla, Lipari, Valencia, Las Carreras, Río Abajo y Mallasa denunciaron, mediante un informe cronológico, que son rehenes de bloqueadores que «aterrorizan» de día y de noche a los familias del sector.

“¡Hace 10 días que estamos siendo privados de nuestros derechos y obligaciones. Nos sentimos rehenes en nuestros propios hogares!”, se lee en el informe que los vecinos hicieron llegar a medios locales. “Por favor ruego a las autoridades velar también por nuestra seguridad y hacer oficial el estado de emergencia en el que nos encontramos”, agregan.

Los afectados relatan que viven “cercados por bloqueadores” que cierran el paso en 13 kilómetros de rutas en esas comunidades con barricadas en las que usan troncos, árboles, calaminas, alambres, turriles, rocas, llantas y maquinaria pesada con la que removieron tierra en el camino. La situación es complicada -según la denuncia- debido a que motociclistas vigilan los puntos de bloqueo cada hora y hacen explotar dinamitas de día y noche.

"Agresivos contra cualquiera que se oponga al bloqueo", señala el informe vecinal. Argumentan que las bases del Movimiento Al Socialismo (MAS) en Mecapaca obligan a cerrar a las gasolineras, farmacias, tiendas de abarrotes, carnicerías y no permiten ni la entrada de ambulancias. Las principales demandas de los manifestantes son la renuncia de la presidenta interina Jeanine Áñez y el retorno de Evo Morales.

Uno de los relatos del documento relata que en Jupapina los bloqueadores pidieron a todos los vecinos apoyarlos con dinero o marchando de lo contrario serían “identificados como enemigos”. Por si fuera poco los vecinos que consiguen salir a comprar alimentos, luego de caminar por horas, al volver son registrados en el puente Lipari.

“Los bloqueadores no sufren de escasez de comida como los vecinos porque reciben almuerzo y bebidas en puntos donde hacen fila para recogerlos. Los bloqueadores no permiten ser grabados con los celulares bajo amenaza de quemar sus casas”, agregan.

“Espero que este documento sirva de prueba suficiente para oficializar que los vecinos del Municipio de Mecapaca estamos en Estado de Emergencia y hago un llamado clamoroso a las Autoridades Competentes a que tomen las medidas correspondientes para resguardar la seguridad y garantizar la libre transitabilidad de todos los individuos que vivimos en la zona (sic)”, señala la nota.

 En un operativo conjunto, los efectivos de las Fuerzas Armadas y la Policía desbloquearon el martes pasado las rutas de ingreso a estas comunidades. Sin embargo los movilizados se agruparon nuevamente y con más intensidad.

“Van en la madrugada a repartir dinero, dinamita y coca. Lo llamativo es que los que llegan en el vehículo y los bloqueadores, se comunican desde la parte de arriba hacia abajo con linternas y luces, lo que parecería clave morse. Cada vez que ven llegar a la Policía o a otras personas que viven en el lugar, coordinan; entonces autos y gente pronto desaparecen”, relató otro vecino.

Ante estas denuncias los diputados por Unidad Demócrata (UD) Amílcar Barral y Wilson Santamaría presentaron, de manera separada, denuncias ante el Ministerio Público en contra de los alcaldes de los municipios de Mecapaca, Enrique de la Cruz, Achocalla, Damaso Ninaja, Palca, Achocalla y Viacha por haber instigado a la violencia.

“Estos señores son los responsables de que la zona Sur y toda la ciudad no se pueda abastecer de verduras y demás, y eso es un delito. Estamos pidiéndole directamente al fiscal de distrito para que él tome las medidas correspondientes sobre este caso”, declaró el legislador.

* AMN