La Asociación de enfermos renales protagonizó ayer una marcha para que la sociedad los reconozca como personas con discapacidad porque aseguran que dependen de una máquina para vivir.

El representante de la Asociación, Edwin Cutili, lamentó que en las últimas semanas se haya planteado que su sector deje de percibir el bono de mil bolivianos anuales, porque no son personas con discapacidad. Además, señaló que su sector aglutina alrededor de 500 personas.

“La sociedad dice que nos estamos aprovechando del bono. No es así, nosotros tenemos calificación en nuestro documento, tenemos la calificación de discapacidad de muy grave y grave. Muchos de las personas enfermas no pueden valerse por sí mismas”, dijo.

Según Cutili la Ley 223  para Personas con Discapacidad reconoce a los enfermos renales como personas con discapacidad y pide que la sociedad cumpla y respete sus derechos.