La categoría de uso de suelo de las 9,5 hectáreas de Jupapina afectadas en la noche del 27 de febrero por un deslizamiento debe ser cambiado para que se transforme en área forestal, sugirió esta mañana el  secretario municipal de Gestión Integral de Riesgos, Vladimir Toro.

Toro, junto al subalcalde de Mallasa, Eduardo Campero, se presentaron ante el pleno del Concejo Municipal para dar un informe sobre la situación de Jupapina y los trabajos realizados en el lugar por la secretaría, luego del deslizamiento.

“Todos los trabajos que se ejecuten en el lugar son para minimizar los riesgos. Estas áreas deben ser tratadas con un criterio de cambio de uso de suelos, estrictamente forestal”, aseguró el Secretario Municipal de Riesgos a los concejales.

LA PROPUESTA EDIL

La propuesta de estabilización de la secretaría, elaborada por ingenieros geólogos, establece que el primer paso es la demolición controlada de las viviendas afectadas por el deslizamiento y la recuperación de los materiales de construcción. Ambas acciones están pendientes porque los propietarios deben firmar  la autorización correspondiente

“Se ha visto conveniente el reacondicionamiento hidráulico del lugar, mediante  sistemas de drenaje combinado para las aguas hervidas y pluviales, un sistema primario y un sistema de protección de márgenes. Es la propuesta que hemos hecho en el tema de conducción de aguas pluviales desde la calle alta a nivel del ingreso de la calle ocho”, dijo Toro. La ejecución de este proyecto tendrá un costo de 50,2 millones de bolivianos.

El subalcalde Campero indicó que tras una evaluación se determinó que el deslizamiento en Jupapina afectó a 21 predios, entre viviendas y terrenos baldíos. Ocho eran casas habitadas, un área en construcción vacía y 12, terrenos. En las viviendas vivían ocho familias propietarias, dos inquilinas y una anticresista.

Agregó que los dueños de cinco de los 21 predios permitieron la demolición controlada, tres rechazaron la medida y el resto aún no fue ubicado.

“Nuestro equipo está tratando de ubicar a la mayor cantidad posible de propietarios y con aquellos que se resisten estamos tratando de hacerles entender que ahora el riesgo es por las otras viviendas que están en pie”.