La Paz, 5 de junio (Oxígeno).- Estudiantes de la Universidad Pública de El Alto (UPEA) salieron, este jueves, junto a vecinos de esta urbe en una marcha de protesta en rechazo al incremento de tarifas del transporte público y el paro indefinido que comenzó el martes.

En su trayecto, la movilización se encontró con otra protagonizada por los choferes. La Policía los gasificó ante el amague de enfrentamientos en la avenida  Juan Pablo II de esta urbe.

El rector de la UPEA, Miguel Vargas, informó que a raíz de este hecho no se registraron personas heridas, pero dijo que muchos estudiantes al igual que los choferes huyeron del lugar ante la intervención de los efectivos policiales que  utilizaron agentes químicos para dispersarlos.

“Los choferes bloquearon y los estudiantes, quienes marchaban junto a los vecinos  se encontraron y hubo un cruce de palabras. Entiendo que la Policía para evitar enfrentamientos entre ambas marchas lanzó gases lacrimógenos”,  relató.

Tras la desmovilización, los 4.000 estudiantes lograron aglutinarse nuevamente para dirigirse a la Federación de Juntas Vecinales (Fejuve) El Alto, ubicada en plena Ceja, donde pretenden realizar un mitin y asumir nuevas medidas de presión contra los choferes que buscan incrementar el pasaje de Bs 1 a Bs1,50.

Alvin Huanca, estudiante de la carrera de Contaduría de la UPEA, lamentó la actitud de la Policía, pero principalmente de los choferes que continúan con el paro indefinido.

Argumentó que la protesta universitaria se motiva en el perjuicio que representa la falta de autotransporte, sobre todo, para aquellos estudiantes que viven en zonas alejadas de esta urbe.

“Estamos marchando, los estudiantes hemos determinado apoyar a nuestros vecinos y no vamos a permitir un incremento de tarifas y menos el trameaje de los choferes”, aseguró.

La noche del miércoles, la Asamblea de la Alteñidad decidió dar un plazo de 24 horas al sector del transporte sindicalizado de El Alto para retomar sus actividades con la tarifa de Bs 1, de lo contrario advirtieron en revocar sus licencias de funcionamiento y la expulsión de las líneas de las zonas afectadas por el paro.

Desde el sábado hasta el martes, el Gobierno Municipal de El Alto y los choferes instalaron, en dos oportunidades, mesas de diálogo pero ambos fracasron debido a que ambos sectores no ceden en sus posiciones.

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