Petrobras es la empresa que opera el mayor número de plataformas flotantes de producción en el mundo
La producción operada por Petrobras en plataformas flotantes en la costa brasileña en diciembre de 2014 alcanzó el promedio de 2 millones de barriles de petróleo por día (bpd) –lo que corresponde al 88% del volumen total de petróleo producido en el país– y 51 millones de m³ de gas por día, que representan el 57% de la producción de gas nacional.

La Paz, 7 de febrero (Oxígeno).- Petrobras es la empresa que opera el mayor número de plataformas flotantes de producción (entre propias y fletadas) en el mundo, según la consultoría Petrodata, especializada en informaciones sobre la industria mundial de petróleo. Según los últimos datos de la compañía, en diciembre de 2014 operaba 110 unidades de producción offshore en la costa brasileña. De ese total, 45 son plataformas flotantes, 29 de las cuales son de tipo FPSO (unidad que produce, almacena y transfiere petróleo), 15 semisumergibles, y una unidad de producción que difiere de los FPSOs por no almacenar petróleo: la P-53. Además de esas 45 flotantes, la compañía también opera cuatro plataformas de tipo FPSO, que solo almacenan y transfieren petróleo.
La producción operada por Petrobras en plataformas flotantes en la costa brasileña en diciembre de 2014 alcanzó el promedio de 2 millones de barriles de petróleo por día (bpd) –lo que corresponde al 88% del volumen total de petróleo producido en el país– y 51 millones de m³ de gas por día, que representan el 57% de la producción de gas nacional. Esos volúmenes no incluyen la parte de Petrobras producida por los FPSOs Frade y Fluminense, instalados en los campos de Frade y Bijupirá-Salema, en la Cuenca de Campos, cuyos operadores son, respectivamente, Chevron y Shell, con participación minoritaria de Petrobras.
Primeros sistemas offshore
Con el descubrimiento de yacimientos de petróleo en aguas someras, en la plataforma continental, en los años sesenta, las primeras unidades de producción instaladas por la empresa en el mar fueron plataformas fijas, clavadas en el fondo del mar, primero en el Nordeste brasileño y posteriormente en la costa del Sudeste. Con el avance de la exploración en aguas profundas, en la Cuenca de Campos, en la primera mitad de los años ochenta, la alternativa encontrada por la empresa para poner en producción los nuevos campos fueron las plataformas semisumergibles y los FPSOs.
Una de las mayores ventajas de los FPSOs es que no necesitan la instalación de infraestructura de transporte de petróleo, ya que están equipados con sistemas de almacenamiento, y la transferencia del petróleo producido hasta la costa se hace a través de buques cisterna. Además, debido a que se pueden construir a partir de la conversión de un casco de buque preexistente, permiten poner en producción un campo con más rapidez, anticipando los ingresos.
FPSOs pioneros
El avance de la exploración en aguas profundas, en plena crisis del petróleo, exigía una solución rápida y económicamente viable para poner en producción campos como Marlim y Albacora, los primeros localizados a profundidades superiores a 500 metros.
En ese horizonte de profundidad era técnicamente inviable instalar plataformas fijas, clavadas en el fondo del mar. De esta manera, en medio de una crisis aguda de oferta de petróleo, que exigía que los campos recién descubiertos entrarán rápidamente en producción, la solución fue convertir buques petroleros de gran tamaño, con la instalación de módulos de procesamiento en la cubierta, transformándolos en unidades de producción.
Con una experiencia de más de 30 años en la utilización de este tipo de plataforma, Petrobras también es la empresa que opera el mayor número de FPSOs en el mundo. La experiencia pionera en este campo fue la conversión de un petrolero en un buque plataforma, en 1977. Fue la solución encontrada para anticipar la producción del campo de Garoupa, en aguas someras, en la Cuenca de Campos, con la conversión del petrolero Presidente Prudente de Moraes. El resultado fue un importante ahorro de tiempo y de recursos. También fue la primera vez que Petrobras utilizó el concepto FPSO, adaptado al escenario de aguas profundas brasileño.
Con los buenos resultados de la experiencia, la compañía empezó a invertir cada vez más en la conversión de los buques petroleros existentes en sistemas definitivos de producción. Los nuevos buques plataforma eran la mejor estrategia para una empresa cuya mayor parte de la producción pasaría a ser en aguas profundas y ultraprofundas. Hoy, casi todo el petróleo producido por la empresa (cerca del 90%) proviene del mar, tanto en aguas someras como profundas y ultraprofundas, a través de distintos tipos de unidades de producción.
Tecnologías innovadoras
Con el apoyo de una vasta red de innovación integrada por instituciones de investigación de todo el país, Petrobras daría entonces una sólida contribución tecnológica a las modernas plataformas. El desarrollo de tecnologías innovadoras en su Centro de Investigación (Cenpes) consagraría los FPSOs como una de las soluciones más adecuadas para campos distantes de la costa y en aguas profundas y ultraprofundas. Soluciones innovadoras, como los cables de poliéster y ancla-torpedo, creados por técnicos brasileños, perfeccionaron los sistemas de anclaje y permitieron una mejor distribución de los sistemas submarinos, así como la instalación de un mayor número de plataformas en una misma área.
Con el descubrimiento de los campos del presal, en la Cuenca de Santos, en los años 2000, localizados a más de 250 kilómetros de la costa y a profundidades de agua superiores a 2 mil metros, los FPSOs representan naturalmente la mejor solución técnica y económica. Esa provincia ya concentra, actualmente, siete FPSOs, incluyendo dos unidades que operan las pruebas de larga duración (TLD).