Juego académico. Bolívar ganó, gustó y goleó a un débil palestino en Chile y tuvo un arranque inmejorable en la Conmebol Libertadores.

La Academia fue el claro dominador de principio a fin. Como pocas veces pasa con los clubes bolivianos, fue a plantear un juego ofensivo en territorio ajeno y fue efectivo con las ocasiones que generó.

Además, la Academia tuvo a un inspirado Fernando da Costa, que fue la figura excluyente de un equipo parejo en todas sus líneas.

El partido fue dominado por la Academia de principio a fin. Y es que desde los primeros minutos se vio el estilo de juego de ambos equipos.

Palestino, a pesar de ser local, nunca quiso – ni pudo- tomar el protagonismo y su juego se basaba en buscar ataques rápidos buscando errores celestes en salida.

Bolívar, en cambio, pudo tener el dominio de balón y con el buen juego de Ramiro Vaca como el eje constructor, Bruno Savio desbordando en la banda izquierda del ataque y Da Costa como el referente en el área puso en muchos aprietos a los chilenos.

Precisamente por la banda de Savio se inició la jugada del primer gol. Y es el centro del brasileño fue bien bajado por Da Costa y Saucedo fue derribado en el área antes de impactar el balón. Fue el primer penal de la noche.

Da Costa ejecutó un remate esquinado que se introdujo en el arco, a pesar de que el arquero local había adivinado el lado. Era el 1 a 0 a los 27 minutos.

El gol, totalmente merecido, hizo que Palestino busque adelantar sus líneas; sin embargo, su ímpetu no duró ni cinco minutos. Bolívar sacó su jerarquía para “congelar” el juego y cuando vio que su rival volvió a estar en modo pasivo volvió a atacar.

Así a los 34 minutos, Savio – que desbordó cuanto quiso- fue derivado en su banda izquierda. Ramiro Vaca ejecutó el tiro libre y lanzó un centro preciso para que Da Costa se anticipe en el primer palo y con excelente cabezazo meta el segundo. Un golazo.

El partido era a pedir de boca para la Academia y la – mayor- tranquilidad llegó a los 44 minutos, cuando el defensor de 17 años de Palestino, Iván Rompan, fue expulsado por doble amarilla.

Prácticamente ahí acabó el partido y el complemento se pintaba a ser un mero trámite. Eso sí, Bolívar fue consciente que la diferencia de goles es importante de cara a definir los clasificados y por eso encontró el tercer gol a los 63 minutos, cuando Ramiro Vaca fue derribado en área rival logrando el segundo penal para los celestes.

Da Costa pudo llevarse el balón, pero cedió el remate a Savio. El brasileño lanzó un remate al centro que fue detenido por el arquero rival, pero aprovechó el rebote para meter el tercero. Ya era goleada.

Con la diferencia en el juego y el marcador, Bolívar bajó el ritmo y dio el balón al local, pero Palestino estuvo sin ideas ni profundidad.

La cereza de la torta la puso Ramiro Vaca, quien metió el cuarto a los 83 minutos para cerrar la fiesta académica en Chile.

Es un inicio soñado para Bolívar. El partido de hoy, en el que visitaba al equipo más débil de su grupo, era fundamental para sus aspiraciones de clasificar a los octavos de final. Ahora, no deberá fallar de local – sin dejar de buscar puntos afuera- para meterse entre los 16 mejores del continente por segundo año consecutivo.