¿Se rompió la maldición del campeón? Francia inició la defensa de su título mundial con una goleada sobre Australia (4-1) en su debut en Qatar.

Según datos del famoso estadista Mister Chip, es la primera vez que un vigente campeón Mundial gana su primer partido desde que lo hiciera Brasil el 2006.

Eso si, el partido sí empezó con los fantasmas de la “maldición” pues Craig Goodwin adelantó a Australia a los 9 minutos de partido y poco después casi aumenta el marcador con un remate que pasó cerca al palo.

Empero, poco duró la alegría australiana, pues a los 27 minutos Rabiot aprovechó una distracción rival y conectó un buen centro de Theo Fernández para empatar el encuentro.

Ahí se rompió la estrategia australiana. Los jugadores del equipo de Oceanía – que representa a Asia en la Copa- empezaron a dudar, perder balones en salida y lo pagaron caro, pues Oliver Giroud logró marcar el segundo gol francés a los 32.

Ya con la ventaja, los ‘Blues’ fueron total dominadores del encuentro y daba la impresión que podía anotar el tecero en cualquier momento. Eso sí, pasaron un último susto en el último minuto del primer tiempo, cuando un cabezazo del australiano Irvine se estrelló en el palo.

Ya en el complemento, Francia no cedió ni el terreno ni la pelota y por eso no pasó ningún sobresalto en defensa. Es más, cada vez que se decidida a atacar estaba cerca de aumentar el marcador y así pasó.

Transcurría el minuto 68 cuando Kylian Mbappé, finalmente, anotó su ansiado gol. El delantero había intentado toda la segunda parte anotar su nombre en el marcador y lo logró gracias a un lindo cabezazo tras centro de Dembelé.

El partido estaba prácticamente liquidado y fue Giroud quien puso cifras finales a los 71 minutos. Con sus dos goles, el delantero del Milán hizo olvidar rápidamente la ausencia de Karim Benzema, quien se quedó fuera del Mundial  por lesión.

Así, Francia arranca en el grupo D como líder con tres puntos y sacando provecho también al empate entre Dinamarca y Túnez horas antes.