César Farías, el ex técnico de la Selección Boliviana de Fútbol, rompió el silencio y en entrevista con un canal deportivo boliviano realizó diversas reflexiones acerca de su paso por la Verde.

“Hacíamos un punto más y era la mejor Eliminatoria de Bolivia en formato de 10 selecciones (todos contra todos)”, resaltó Farías al empezar a hablar de su etapa como Seleccionador del equipo de todos.

Empero, señaló, en las dos últimas fechas de las Eliminatorias – en las que Bolivia ya no tenía chances de clasificar al Mundial- optó por dar minutos a jugadores jóvenes como una forma de ayudar al futuro de la Selección y sin pensar en los resultados, ni en su “ego personal”.

Farías, en ese sentido, aseguró que ya sabía que “no me querían en la Selección” antes de disputarse la última fecha doble de las Eliminatorias y lamentó que en el país no se crea en los procesos y tampoco se dé espacio a los jugadores jóvenes.

“Bolivia no cree en procesos. Tu quieres exigencias para el futbolista boliviano pero no le das las condiciones. Con preocupación veo que no hay un trabajo de la Federación Boliviana de Fútbol severo en la construcción de una selección que vaya creciendo, desde inferiores”, criticó.

Cuestionó, por ejemplo, que la Verde haya estado varios meses sin entrenador y, ahora que contrató al argentino Gustavo Costas, éste aún no haya podido empezar a trabajar por el contrato que tiene con el Palestino chileno.

“¿Quien recupera los meses que se perdieron? Eso no es una crítica, es una reflexión”, señaló.

Asimismo, el técnico venezolano criticó el sistema de competencia boliviano y cuestionó la cantidad de extranjeros y nacionalizados que pueden jugar en el fútbol boliviano, en desmedro de los jóvenes talentos nacionales.

“Necesitas que tus jugadores tengan un espacio. Si un jugador juega en la Selección pero no juega en sus clubes porque se nacionaliza a jugadores de 30 y pico o hay 6 extranjeros, es difícil que crezca (…)  Los jugadores se hacen con acción y error”, aseveró.

Las “crueles” críticas bolivianas y su sed de revancha

Tras dejar la dirección técnica de la Selección boliviana, Farías ahora triunfa con el Aucas ecuatoriano, equipo al que logró clasificar por primera vez en su historia a la Copa Libertadores y con el que llegó a la final del torneo ecuatoriano.

Consultado sobre su presente, Farías no tuvo reparos en afirmar que tomó el reto de dirigir al Aucas como una “revancha personal” ante las duras críticas que recibió en Bolivia.

“En muchos aspectos fueron crueles con nosotros en Bolivia y teníamos sed de revancha personal, queríamos demostrar”, aseveró.

Afirmó que si bien en Ecuador también ha recibido algunas críticas a su trabajo, sobre todo en sus primeros meses, siempre se respetó su trayectoria y, dijo, eso es algo que se agradece

En ese sentido, el venezolano afirmó que en Bolivia las críticas a su trabajo y a la Selección fueron de “poco análisis futbolístico” y enfatizó que aún con su salida de la Verde las cosas no han cambiado en el fútbol boliviano.

“Se fue Farías y no he visto que solucionen sus problemas”, sentenció.