El delantero boliviano Carmelo Algarañaz logró desvincularse del club Ismaily de Egipto y denunció que fue víctima de maltrato y racismo en su, ahora, ex equipo.

“Fui objeto de maltrato, racismo severo, amenazas y muchas otras cosas de las que no me gusta hablar pero afortunadamente cuento con las pruebas suficientes para sostener lo que digo”, posteó el delantero cruceño en sus redes sociales.

Según el texto, la ruptura del contrato fue de forma uniltareal de parte del jugador y acusó al Ismaily de no saber tratar a un jugador internacional profesional.

“Lastimosamente la gerencia que me trató con la mayor falta de respeto y falta de profesionalismo, no respetaron mis derechos ni  cumplieron con la totalidad de sus obligaciones”, señala.

Afirmó que respetó la decisión del técnico, a pesar de que lo borró del primer equipo, lo mandó a entrenar con la reserva y “menospreció” su capacidad como jugador.

Aclaró que agradece el apoyo y confianza que la afición del equipo vertió en su persona.

“A pesar de todas las dificultades, hago llegar mi agradecimiento a todos los hinchas de Ismaily por su amor confianza y apoyo. Su público es totalmente diferente a los dirigentes del club por lo que siempre les estaré agradecido”, agregó Algarañaz.

Carmelo Algarañaz, jugador de 26 años, disputó apenas dos partidos con el club Ismaily y marcó un tanto, al Al-Ahly.

Su futuro estaría en el Always Ready de El Alto, club en el que ya militó antes de irse a Egipto, a inicio de este año.