La Paz, 15 de octubre (Infobae).- El jugador de rugby del Wigan Warriors inglés Ben Flower recibió una sanción de seis meses por los brutales puñetazos que le propinó a Lance Hohaia, jugador del St Helens, durante la final de la Súper Liga de Inglaterra.

Flower, de 26 años, tiró al piso a su rival con un golpe en el rostro y después volvió a pegarle dos salvajes puñetazos cuando estaba tumbado sobre el césped. Inmediatamente, el galés fue expulsado, pero tan sólo dos minutos del partido.

Pero, finalmente, la Rugby Football League inglesa (RFL) tomó las riendas y culpo al jugador de realizar una ofensa de Grado F, la categoría más grave de las normas disciplinarias de ese deporte.

En consecuencia por la agresión, Ben Flower estará inhabilitado en Inglaterra hasta el 15 de abril, por lo que se perderá el inicio de la próxima temporada.

El pasado domingo, el Wigan y el jugador emitieron un comunicado conjunto para disculparse públicamente con Hohaia, su familia y los aficionados del St Helens.

"La victoria del St Helens se ha visto ensombrecida por este incidente, y eso no es correcto. La gran final fue un encuentro increíble y el St Helens es el merecido ganador", dijo el club en su nota.

"Esperamos que el respeto y la sana rivalidad entre ambos equipos se mantenga intacta", dijo el equipo, que recalcó que Flower está "completamente arrepentido" por su acción y anunció que no presentará recurso alguno contra la sanción.

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