El cuadro cochabambino recibió ayer el apoyo de su hinchada y cerca de 20.000 espectadores celebraron el título. Aurora mostró ambición desde el primer minuto del partido, con el brasileño Charles Da Silva y el argentino Matías Vicedo como los protagonistas del juego ofensivo.

En el primer tiempo del partido definitorio, Aurora fue dominador, generó al menos cuatro ocasiones de gol, pero no supo traducir ese control en el marcador.

El equipo del pueblo fue más, pero una descoordinación entre el primer juez de línea Edwin Paredes y el árbitro Alejandro Mancilla generó la polémica, de donde salió el gol de la victoria desde los 12 pasos.

El asistente Paredes cobró fuera de juego; pero Mancilla cobró penal, luego retrocedió, pero tras unos minutos de diálogo con su cuarto juez, Luis Irusta ratificó el penal que fue convertido en gol por Vicedo, que fue el héroe de la jornada.

“Sí se pudo, sí se pudo”, “Dale Aurora y dale, dale Aurooo...” o “¡Viva Aurora!”, fueron algunos de los gritos eufóricos con los que el público celeste festejó una vez que terminó el partido al minuto 95. Lágrimas y llantos de emoción, en unos, algarabía y gritos, en otros, fue lo que se observó en las más de 22 mil almas que presenciaron la victoria del cuadro celeste, la cual le sirve para retornar al fútbol profesional la próxima temporada.