Buenos Aires, 01 de enero (Agencias).- Cuando faltan pocas horas para el inicio de la nueva versión del Rally Dakar 2016, el director de la competencia, Etienne Lavigne, expresó sus dudas sobre la continuidad de esta competencia internacional si solamente Argentina y Bolivia asumen el reto de sostenerla.

"No es el mejor año porque sin el apoyo de los países es muy, muy difícil de organizar este evento", declaró a la agencia dpa el director de Amaury Sport Organisation (ASO) en Buenos Aires. Lavigne añadió que representa "un presupuesto colosal el tema de la logística, principalmente, y el de la seguridad".

"Es por eso que este año podemos asumir las turbulencias pero en el futuro tenemos que recuperar el apoyo de más países para sostener el evento", señaló el director, que piensa un Dakar por nuevos escenarios sudamericanos. En ese sentido, hizo conocer que retomaron contactos con los representantes de los gobiernos de Chile, Perú y Uruguay, para que consideren la idea de participar en las próximas versiones.

En el caso boliviano, el gobierno del presidente Evo Morales ya hizo conocer su intención de que la versión del Rally Dakar 2017 también pase por territorio boliviano, incluso por nuevos escenarios como el Chaco.

El rally concentrará este año diez de sus trece etapas en Argentina y destinará otras tres a la región de Uyuni en Bolivia. Tanto Chile como Perú rechazaron recibir la carrera en esta ocasión.

La octava edición del Dakar en Sudamérica y la número 38 de su historia será sin embargo una carrera fuera de pista "de calidad" con "la participación de pilotos extranjeros fantásticos", sostuvo Lavigne.

"Obviamente lo que ahora nos ocupa es el Dakar 2016, pero hemos creado muchos contactos para restablecer las negociaciones con Perú y con Chile. También viajamos a Uruguay en diciembre para presentar un proyecto vinculado el Dakar. Es temprano para saber el recorrido, pero caminamos para trabajar de nuevo juntos", dijo Lavigne.

Más allá de las dificultades, el Dakar largará mañana de Buenos Aires con récord de inscriptos, 556 competidores de 60 nacionalidades, el debut de prestigiosos pilotos como Sebastien Loeb y Mikko Hirvonen y la eterna promesa de aventura y riesgo.