La Paz, 12 de noviembre (Oxígeno).- La Selección Boliviana ganó por 4 tantos contra 2 Venezuela en un partido en el que se mostró irregular. El entrenador Julio César Baldivieso encontró, en buena hora, un esquema que ha permitido eficiencia y, lo más importante, goles en el arco rival. Esa es la noticia, Ramallo empezó a marcar la diferencia. Pero también hubo una dosis de lo ya conocido, la defensa mostró debilidades para el susto nacional.

Fue un inicio atípico para lo que acostumbra la Selección. Los dirigidos por Baldivieso tuvieron 25 minutos de un juego arrollador y con mucha presión en cada jugada. Además, aprovechó que Venezuela entró al gramado del Hernando Siles sólo con la misión de defender el cero en arco y se vio superado por la Verde.

Si Bolivia tuvo un mérito fue salir a buscar el gol desde el primer minuto. Las sociedades que se formaron entre Lizio, Cardozo, Chumacero y Ramallo dieron sus frutos.

A los 6 minutos Bolivia ya tuvo su primera opción clara. Lizio desbordó por la banda izquierda, amagó a dos defensores venezolanos y mandó un centro preciso para Alejandro Chumacero, que sólo frente a Baroja cabeceó el cuerpo del arquero.

Empero, la presión boliviana no paró. Producto de ello Rudy Cardozo tuvo la segunda posibilidad clara en sus pies, un pivoteo de Ramallo lo dejó con el arco a disposición pero su remate salió desviado.

No fue sino hasta el minuto 18 en que la Verde pudo abrir el marcador. Rudy Cardozo devolvió gentilezas y habilitó a Rodrigo Ramallo, el delantero tuvo la tranquilidad que le faltó a sus compañeros y con un toque suave superó la resistencia del arquero venezolano.

El gol fortificó a una Selección que encontró el segundo gol cuatro minutos después. Damián Lizio recibió el balón por el sector izquierdo, hizo la diagonal hacia el área, pasó el balón a Ramallo que se la devolvió de primera, y cuando Lizio se disponía a rematar fue trabado por Lucena y el árbitro no dudó en cobrar el penal.

Juan Carlos Arce – de mal partido- tomó la responsabilidad y con un remate fuerte al medio del arco convirtió el 2 a 0.

La temprana diferencia pareció jugar en contra a la Selección, que bajó los decibeles y la intensidad de su juego. Esto fue bien aprovechado por Venezuela que de a poco empezó a adelantar sus líneas y a desnudar las deficiencias de la defensa boliviana.

Ahí se vio que cuando se la ataca, la defensa boliviana empieza a dudar. Consecuencia de aquello llegó el descuento venezolano. Rincón lanzó un remate que rebotó en Walter Veizaga y llegó a los pies de Rondón. La desconcentración de la defensa boliviana quedó en evidencia pues ni Martelli ni Zenteno atinaron a reaccionar y el delantero venezolano logró vencer la resistencia de Daniel Vaca a los 30 minutos de juego.

Los siguientes minutos se tornaron parejos. Ninguno de los dos logró crear jugadas de peligro y la lucha se trasladó, principalmente, a la mitad de la cancha.

No fue sino hasta los 45 minutos del primer tiempo que Alejandro Chumacero desbordó por la banda derecha y lanzó un centro preciso que Ramallo cabeceó de gran manera para convertir el 3 a 1.

Así terminó el primer tiempo.

En segundo tiempo tuvo un inicio muy parecido al primero. La Selección entró con el objetivo de convertir un gol más y lo consiguió rápidamente gracias a una buena jugada de Alejandro Chumacero y un gran remate de Rudy Cardozo. Chumacero ha sido un motor que contribuyó a la primera victoria de la era de Julio César Baldivieso.

La jugada empezó en los pies de Erwin Saavedra que lanzó un pase largo para Alejandro Chumacero. El volante nacional hizo una jugada casi maradoniana. Tocó el balón con el taco y desastibilizó al defensa venezolano. Desbordó sólo y lanzó el pase a Rodrigo Ramallo que sacó un derechazo bien despejado por Baroja; sin embargo, el balón llegó a los pies de Rudy Cardozo que sacó un remate cruzado que venció la resistencia del arquero venezolano a los 49 minutos del partido.

Sin embargo, una vez más, el gol y la diferencia jugó en contra de la Selección que retrasó líneas y cedió el protagonismo del partido.

Es por eso que, una vez más, el equipo Vinotinto llegó al descuento. Una desconcentración de la última línea boliviana permitió a Blanco sacar un remate cruzado que no pudo ser contenido por Daniel Vaca.

Además, Baldi dispuso el ingreso de Jaime Arrascaita en lugar de Rodrigo Ramallo. Eso hizo que Juan Carlos Arce sea el único delantero nacional, pero el delantero cruceño no hizo un buen partido y terminó discutiendo más de lo que aportó en el campo de juego.

Así el partido entra en una laguna futbolística. Ninguno de los equipos encontró la calma para crear nuevas jugadas de peligro. En contrapartida, el partido se hizo cada vez más brusco.

Eso sí, Venezuela era el equipo que controlaba el balón y Bolivia sufría en defensa, sobretodo en pelotas aéreas. Quedó claro que Martelli y Zeneto aún no logran complementarse bien en la última líena boliviana. Y así llegó la jugada más peligrosa de los últimos minutos. Un tiro de esquina de la Vinotinto que fue cabeceado por Rolón se estrelló en el travesaño del equipo boliviano.

Esa jugada fue un llamado de atención para Baldivieso, que inmediatamente después de esa jugada dispuso el ingreso de Ronald Eguino para reforzar la línea defensiva. En ese momento, el esquema que había utilizado Baldi sufrió una modificación clara. De jugar con una línea de 4, la Selección pasó a defender con 5 hombres, tal y como lo había hecho en su visita a Ecuador.

Ya en los últimos minutos, el nerviosismo se notó en los jugadores venezolanos que pegaron cada vez que pudieron. Por eso Sejías fue expulsado a los 90 minutos por una agresión en contra de Jaime Arrascaita.

Al final Bolivia ganó por 4 goles contra 2 pero con un rendimiento que tuvo notorios altibajos. En cualquier, la noticia es lo más importante. Bolivia ganó.  ///