05 de septiembre (Página Siete).- Ocurrió lo que muchos temían. Bolivia cayó estrepitosamente ante Argentina  por 7-0, en el amistoso que se jugó anoche en Houston, Estados Unidos. Con ese marcador se ratificó el mal momento del fútbol nacional, el peor de su historia.

La Albiceleste, número uno del mundo, la tuvo muy fácil desde el inicio. Demostró por qué está en la cima de la clasificación y también quedó claro el por qué la Verde está en el puesto 67 del ranking FIFA.

La definición del juego comenzó temprano. A los cinco minutos Sergio Agüero tiró un pase cruzado para Ezequiel Lavezzi, quien con un remate raso venció a Daniel Vaca e inauguró el marcador y desnudó, una vez más, los problemas defensivos del equipo nacional.

De ahí en adelante el equipo que vistió de azul marcó el ritmo del partido, controló el medio terreno y cuando quiso se lanzó al ataque y creó zozobra en la portería boliviana.

A los 33’, Erik Lamela y Agüero se juntaron, destrozaron a la defensa con tres toques y el Kün anotó con un globito.

A los 40’, Wálter Veizaga cometió una falta, él y los defensores se durmieron, no los argentinos, que cobraron la falta, dejaron mal parados a la defensores y convirtieron el tercer tanto a través de Lavezzi.

Bolivia llegó a la puerta de Sergio Romero en tres oportunidades, Marcelo Martins fue quien le exigió más con un remate, luego no hubo más complicaciones para Argentina.

En el segundo tiempo los argentinos mantuvieron el ritmo y no dudaron a la hora de hacer daño. A los 59’ Agüero puso el 4-0 tras un error de Abraham Cabrera. Luego le tocó entrar a Lionel Messi, quien a los dos minutos de pisar el césped (66) puso el 5-0, le ganó en el cabezazo a Ronald Raldes.

 Cinco minutos después otra vez la estrella del Barcelona dijo presente en el tanteador, luego de una gran asistencia de Agüero y puso el 6-0.

 Joaquín Correa, que entró en el segundo tiempo, fue quien anotó el séptimo tanto. Fue a los 83’ con un remate de media distancia, lejos del alcance de Vaca.

En esta etapa sólo hubo un equipo en el terreno de juego, el argentino, que supo mandar y controlar el partido a su antojo, ante una Selección nacional que no tuvo rumbo.

Era un partido que el DT Julio Baldivieso no lo quería jugar, lo hizo por obligación.

Queda pensar en el debut en la eliminatoria frente a Uruguay, en el partido que se jugará en La Paz a las 16:00 el próximo 8 de octubre.

Baldivieso quiere un microciclo en La Paz

Julio César Baldivieso le pidió al presidente de la Liga, Marco Ortega, la posibilidad de que el seleccionado nacional tenga un microciclo de trabajo antes de jugar las primeras dos fechas de las Eliminatorias al Mundial de Rusia 2018, las mismas que arrancarán el próximo 8 de octubre.

Sin embargo, el gran problema que existe en el momento es la poca disponibilidad de fechas para cumplir con ese pedido.

Antes de la novena fecha que debe disputarse a partir del 25 de septiembre, existe la posibilidad de que el seleccionado trabaje cuatro días; pero el referendo que se realizará una semana antes obligará a que se suspendan cuatro juegos y lo más probable es que sean reprogramados en esa semana, postergando el deseo del nuevo seleccionador nacional.

"Necesitamos estar juntos y que los jugadores entiendan la idea de juego que pretendo para afrontar las Eliminatorias que están a la vuelta de la esquina, ojalá podamos encontrar la comprensión de los clubes y de la Liga”, dijo el DT.

Lo que está seguro son los 10 días previos que concedió la Liga a la Verde para que trabaje antes de los encuentros contra Uruguay (La Paz) y Ecuador (Quito).

El torneo Apertura ingresará en un receso luego de la novena fecha, el domingo 27 de septiembre. El equipo nacional practicará desde el lunes 28, en La Paz.

Baldivieso pretende que los juegos en condición de local se realicen desde las 12:00, caso contrario, pidió a la dirigencia que se juegue a las 15:00.

El ejecutivo de la FBF pide respeto a las autonomías

La cúpula dirigencial de la Federación Boliviana de Fútbol (FBF) envió ayer una carta al presidente de la FIFA, Joseph  Blatter, para "persuadir a la Conmebol” de que respete "las autonomías otorgadas a las Asociaciones Nacionales” y  refutar  los argumentos con los que Carlos Chávez pidió el 20 de agosto, mediante otra misiva, una "postura enérgica” contra el balompié nacional.

En cinco puntos, Marco Ortega, titular interino de la FBF, y Wálter Torrico, secretario general federativo, "aclaran” que Chávez está detenido preventivamente en Palmasola, mientras el Ministerio Público efectúa una investigación que "el 1 de julio solicitó el propio Chávez, en una conferencia de prensa”.

En la misiva, los directivos federativos dicen que la FBF no está de acuerdo con el proyecto de Ley del Deporte: "Es sólo un proyecto, a la fecha no tiene vigencia constitucional, dicha propuesta no está consensuada ni avalada por la federación”.

Justifican que el nuevo comité ejecutivo entregó documentación de la FBF a la Fiscalía porque Chávez se negó a colaborar en la investigación que él pidió a la Fiscalía.

Rechazan la versión de que Chávez es víctima de una "canallada” (como dice en su carta del 20 de agosto) porque él votó por Blatter. "Esto es sólo una argucia para tratar de victimizarse ante su autoridad”, dicen los dirigentes.

Fueron "contundentes” al asegurar que "no existe ninguna intervención de parte del Gobierno a la FBF” e informan que "existe un nuevo comité ejecutivo nombrado, que fue nominado en aplicación a nuestro estatuto, sin influencia de ningún órgano externo”.

Ortega y Torrico le piden a Blatter "coadyuvar en el cumplimiento de las determinaciones estatutarias” del balompié boliviano.