Santa Cruz, 10 de junio (Oxígeno).- Más de 2.000 asistentes presenciaron, en una semana, las obras cinematográficas exhibidas en el festival de cine “Madre Tierra” en el marco de la Cumbre G77.

En el cine Bella Vista se tuvo una propuesta para la ciudadanía organizada por la Coordinación del G77 y el Ministerio de Medio Ambiente y Agua (MMAyA), a través del Programa Nacional de Biocultura y la Cooperación Suiza en Bolivia, primero con una muestra fotográfica de flora y fauna del Servicio Nacional de Áreas Protegidas y la presencia del director de cine Eduardo López (Inal mama), Viviana Coloma en representación de Juan Carlos Valdivia (Ivy Maraey) y el cuerpo de guardaparques representados por el señor Santos Mamani de la Asociación Boliviana de Agentes de Conservación.          

Por su parte, la población cruceña se volcó multitudinariamente a la espera de ver el cortometraje Hilo de Oro de los Andes (Bolivia) y la película Ivy Maraey (Bolivia). En el preámbulo, los tres Viceministros del MMAyA entregaron las estatuillas Madre Tierra, en reconocimiento al aporte artístico por el medio ambiente a los directores Eduardo López y Juan Carlos Valdivia, además del cuerpo de Guardaparques por su trabajo constante en la conservación y cuidado del medio ambiente.

Al respecto, el viceministro de Agua Potable y Saneamiento Básico, Rubén Méndez destacó "que el trabajo de cuidado del medio ambiente es tarea de todos y todas".

A su vez, Eduardo López comentó que "la conservación del medio ambiente no es un discurso sino acción y una forma de vida que debemos asumir". Por su parte, Santos Mamani, en una alocución conmovedora, recordó la memoria de sus colegas caídos durante el cumplimiento de sus funciones. "A nombre del cuerpo de guardaparques, agradezco profundamente este acto, ya que es la primera vez en nuestra historia que reconocen nuestro trabajo de protección y conservación”.

Concluido el festival, los organizadores calificaron la iniciativa de positiva, pues los asistentes manifestaron que estos espacios son necesarios, por lo que deberían ser más frecuentes para llegar a los estudiantes y a las familias.