El jefe de la alianza opositora de Comunidad Ciudadana (CC), Carlos Mesa, a través de un escrito en su blog personal, afirmó que la denuncia en su contra y otros líderes de oposición por el ‘caso Golpe de Estado’ tiene el objetivo de “descabezar” a la oposición.

“Es una caza de brujas, una persecución para descabezar todo vestigio de oposición, una forma más de revelar la cercanía del MAS a las dictaduras de Nicaragua y Venezuela”, afirmó Mesa.

El líder de CC, en ese sentido, reiteró que el 2019 no hubo un golpe de Estado en el país y criticó que el MAS busque “descalificar” a organismos internacionales que ese años coadyuvaron en lograr la pacificación del país.

 “En la grave crisis política de 2019 la Iglesia, la Unión Europea, la ONU y la OEA, hicieron una contribución invalorable a la paz y a la democracia bolivianas; la respuesta de los autócratas fue acusarlos y descalificarlos. No contentos con eso persiguen, hostigan, apresan y condenan a quienes fuimos invitados por esas instituciones para que esos objetivos tan necesarios al bien común, fuesen posibles”, señala.

En ese sentido, Mesa también se refirió al ex presidente Evo Morales, a quien acusó de tomar una “serie de decisiones y acciones violatorias a la norma y a la Constitución” como su “ilegal” postulación el 2014 y el presunto fraude electoral del 2019 y de gozar de una “impunidad” de parte de la justicia.

“La razón obvia por la que Morales sigue impune es que, a pesar de los juicios abiertos en su contra goza de la abierta protección del Ministerio Público y los máximos jueces del Estado. Es este personaje respaldado por el actual Presidente (Luis Arce) y su gobierno, quien usa a sus obsecuentes abogados, para armar acusaciones delirantes a diestra y siniestra, mezclando a justos y pecadores con intención de perpetuar la mentira” fustigó.

El pasado miércoles, el comité impulsor del caso Golpe de Estado presentó una denuncia formal por la supuesta comisión de los delitos de genocidio, alzamiento armado, conspiración, entre otros, en contra de los expresidentes Carlos Mesa, Jorge Tuto Quiroga; los excívicos Luis Fernando Camacho – actual gobernador de Santa Cruz- y Marco Antonio Pumari, el empresario y político opositor Samuel Doria Medina y los exministros de la gestión de la exmandataria Jeanine Áñez.

La denuncia, incluso, alcanza a los exministros Karen Longaric, Jerjes Justiniano, Arturo Murillo, Fernando López, José Luis Parada, Yerko Núñez, Roxana Lizárraga, Mario Ordóñezy Rodrigo Guzmán.

Además, también están incluidos el excomandante de la Policía, Yuri Calderón, y de las Fuerzas Armadas Williams Kaliman y hasta el exministro del Gobierno de Goni (2002-2004), Carlos Sánchez Berzín.

En específico, la denuncia es por los delitos de alzamiento armado contra la seguridad y soberanía del Estado, atribuirse los derechos del pueblo, conspiración, atentados contra el presidente y otros dignatarios de Estado, instigación pública a delinquir, organización criminal y genocidio.