Dos directores de medios de comunicación y dos periodistas se reunieron con Denis Raicot, representante en Bolivia de la Oficina del Alto Comisionado para los Derechos Humanos y pidieron la presencia de un Relator Especial que compruebe las acciones de intimidación del Gobierno en contra del trabajo de los periodistas.

El vicepresidente llama a los medios de comunicación “cartel de la mentira”, el presidente se refirió a ellos como una “mafia”; los directores de Página Siete y de la Agencia de Noticias Fides, Juan Carlos Salazar y Sergio Montes, y los periodistas Andrés Gómez y Raúl Peñaranda, rechazaron los calificativos y acudieron a este organismo internacional.

El ministro Juan Ramón Quintana en la interpelación del 19 de mayo en el Legislativo boliviano, mencionó a todos ellos y a la periodista Amalia Pando, quien el lunes pidió protección a la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), organismo perteneciente a la OEA. 

La oficina de Racicot emitió una declaración pública sobre las irregularidades cometidas en la detención del abogado Eduardo León, quien defendió a Gabriela Zapata expareja del presidente Evo Morales.

El Comité de Protección a Periodistas (CPJ) se pronunció ya sobre este caso, Carlos Lauria coordinador del programa de las Américas del CPJ, desde Nueva York, expresó: “Estas acusaciones infundadas y amenazas contra los medios bolivianos tienen el evidente propósito de restringir la labor periodística sobre temas sensibles. (…) Instamos a las autoridades bolivianas a abstenerse de amenazar a periodistas por su trabajo y a permitir que los medios funcionen sin interferencias".