El boxeador boliviano aguantó tres asaltos, en los que fue duramente castigado, finalmente el réferi decidió detener la batalla y le dio el título al montenegrino Dejan Zlaticanin.
El partido estaba empatado con un espectacular gol de Jhasmani Campos, pero un juez de línea marcó un penal dudoso y Chile ganó con dos goles de Arturo Vidal.